Al menos 10 personas han muerto, incluidos cinco niños, en el incendio de un edificio de viviendas en la localidad de Vaulx-en-Velin, en las afueras de Lyon (Francia). Los niños fallecidos tenían entre tres y 15 años.
La policía ha abierto una investigación sobre el origen y las causas del incendio y no descarta la pista criminal.
El balance de fallecidos, publicado por la prefectura de Auvergne-Rhône-Alpes, podría aumentar ya que hay cuatro personas en estado muy grave, según los servicios de emergencia. Hay otras 10 personas heridas leves, incluidos dos bomberos que intervinieron en el lugar.
El incendio se desató en un edificio de siete pisos alrededor de las tres de la madrugada de este viernes. El fuego comenzó en la planta baja y se extendió a los pisos superiores. Aunque ya ha sido extinguido, se desconoce su origen y ya se ha abierto una investigación.
En un comunicado publicado este viernes, la Fiscalía indica que los servicios de la dirección en la zona de la Policía Judicial se encargan de la investigación, que deberá determinar las circunstancias y las causas del incendio y que "no se descarta ninguna hipótesis, en particular la pista criminal".
La policía ha acordonado la zona y ha establecido un perímetro de seguridad en el que trabajan 170 bomberos y varios equipos de los servicios de emergencia.
"Salvad a mi hijos"
Un testigo del incendio relató a la televisión BFM que consiguió llevar una escalera a la fachada del edificio por la que pudo huir en torno a una veintena de personas.
Otro testigo apuntó como posibles culpables a supuestos narcotraficantes que ocuparon viviendas de forma ilegal, algo que es común las plantas bajas de los edificios en invierno en la zona.
Ambos relataron que se oían llantos de niños y voces de adultos gritando "salvad a mi hijos".
En declaraciones al periódico regional Le Progrès, algunos habitantes acusaron a los camellos que supuestamente ocupaban y utilizaban para el trapicheo de drogas los bajos de este edificio de viviendas en Mas le Taureau, un barrio popular de Vauxl en Velin, una ciudad de cerca de 50.000 habitantes a las afueras de Lyon.
Un vecino, que se identificó como Sami, se quejó de que, según su versión, los responsables quieran ocultar que el suceso "viene del punto de trapicheo en la planta baja. Ahí comenzó el incendio. He visto a niños saltar del balcón. Era horrible".