La dimisión del presidente de la BBC, Richard Sharp, ex alto cargo de Goldman Sachs y asesor de Boris Johnson, a cuenta de su papel como mediador para que el ex primer ministro obtuviera un crédito de 900.000 euros antes de su nombramiento es el último capítulo de los muchos escándalos protagonizados por el antiguo líder del Partido Conservador británico.
En julio del 2022 Boris Johnson anunció su dimisión como primer ministro de Reino Unido tras el goteo de dimisiones de los miembros de su Gobierno y del partido tory al conocerse que había nombrado al conservador Christopher Pincher, sobre quien pesabanacusaciones por abusos sexuales que cargaban sobre el legislador.
Pero Johnson acumula una lista abultada y notablemente variopinta de situaciones que han atravesado severos escrutinios por parte de la opinión pública, no sólo la británica.
Johnson, el candidato que sedujo con unas patatas fritas con sabor a gambas
Boris Johnson ejercía como periodista para el Daily Telegraph y en 2001 se lanzó de lleno a labrarse una carrera política conquistando a los delegados conservadores con un discurso en el que apostó por privatizar en Sistema Nacional de Salud. Pero lo hizo a partir del cuento de quién se come la tostada, un discurso que horrorizó a muchos y que, sin embargo, lo catapultó como candidato tory, según describe el escritor y periodista irlandés Fintan O’ Toole describe en El fracaso heroico. El Brexit y la política del dolor.
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En aquellos años el Brexit crecía conforme los representantes públicos centraban sus críticas hacia una Europa que avanzaba pequeñas regulaciones. Johnson hizo toda una bandera política para defender los hábitos del inglés medio al denunciar que la UE, supuestamente, quería prohibir las patatas fritas "con sabor a cóctel de gambas", un sinsentido que subió la intensidad del incipiente debate sobre el Brexit en torno a la "identidad británica"...
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Como si los tecnócratas de Bruselas estuvieran pensando en aquello, cuando en realidad la UE buscaba desde 1991 limitar el uso de edulcorantes artificiales en los alimentos. Explica Fintan O’ Toole en El Confidencial que un sector de la prensa lo llevó al terreno de la "amenaza al patrimonio británico de las patatas fritas de sabores".
Boris Johnson y su Partygate: la fiesta de cumpleaños durante la pandemia
Mientras la mayoría de la sociedad del Reino Unido veía restringidos sus derechos más básicos en aras a "limitar la propagación" de la Covid-19 en los peores momentos de la pandemia, el entonces primer ministro disfrutaba de sonadas fiestas con miembros de su Gobierno: fiestas ilegales, exentas de cualquier medida anti Covid-19, en la propia oficina de Johnson.
Pero cuando recibió una multa de la Policía por asistir a una fiesta de cumpleaños en Downing Street, en la víspera del funeral del príncipe Felipe, marido de Isabel II, en abril del 2021, Johnson llegó al colofón del escándalo. Al filtrarse los detalles, se vio obligado a pedir disculpas a la reina Isabel.
Posteriormente, la funcionaria encargada de la investigación independiente y oficial sobre el Partygate, Sue Gray, detalló que en aquellas fiestas había un consumo excesivo de alcohol, alguna que otra pelea e intoxicaciones.
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Una y otra vez Johnson negó estar al tanto de fiestas ilegales hasta que reconoció su equivocación, eso sí, alegando que creía "sinceramente" que las reuniones no infringían la ley.
La controvertida prórroga en el Parlamento para aprobar el Brexit
La reina Isabel II ordenó en verano de 2019 una prórroga parlamentaria atendiendo a la petición del primer ministro para sacar adelante el Brexit y el 10 de septiembre se materializó la suspensión de la Cámara, generando confusión y revuelo en el país ante una decisión que algunos tildaron de "golpe de Estado".
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Las acusaciones no ponían en duda el mecanismo sino la finalidad del parón parlamentario, con la ciudadana en vilo y centrada en las posibles consecuencias que tenía la prórroga respecto a un Brexit que había sido tumbado en el Parlamento en numerosas ocasiones.
En la oposición, el Partido Laboralista vio en la maniobra del primer ministro un intento de vetar el control parlamentario a los planes del Gobierno para forzar la salida del Reino Unido de la UE. Pese a que la Justicia Británica anuló la prórroga, considerándola "nula y sin efecto", en diciembre se consumó el Brexit con una ajustada mayoría.
Boris Johnson y su reunión con un oligarca y exagente de la KGB
Se trata de Alexander Lebedev, con quien se encontró de forma privada en 2018 en Italia sin funcionarios presentes. En aquel entonces, Boris Johnson ejercía como ministro de Exteriores y sólo cuando su dimisión comenzó a materializarse reconoció que tal encuentro se había producido.
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Se supo a raíz de una pregunta de la diputada laboralista Meg Hiller en la Cámara de los Comunes en la que cuestionaba si Johnson había informado al menos a los miembros de su Ministerio. Su respuesta fue: "Creo que lo mencioné, sí".
Los escándalos sexuales en las filas de los tories
El Partido Conservador se ha visto salpicado por acusaciones de abusos sexuales y conductas inapropiadas en varias ocasiones. El legislador conservador Imran Ahmad Khan dimitió tras ser declarado culpable de haber abusado sexualmente de un chico de 15 años.
Neil Parish, otro legislador conservador, dimitió tras admitir que vio pornografía en su teléfono en la Cámara de los Comunes en dos ocasiones, en lo que definió como "un momento de locura".
El apartamento del primer ministro y su polémica reforma
La reforma de Downing Street que ocupaba entonces Boris Johnson le costó al Partido Conservador una multa de 17.800 libras de la Comisión Electoral británica por no informar correctamente de una donación que había recibido para pagarla.