Kompromat, la estrategia de desinformación rusa de la que Fridman, dueño de Dia, alega ser víctima

El multimillonario ruso Fridman, ha declarado este jueves ante el Tribunal Superior de Londres que la NCA (Agencia Nacional contra el Crimen) de Gran Bretaña había allanado su residencia familiar con una orden obtenida ilegalmente, basada en el "kompromat clásico".

El nombre de Mikhail Marátovich Fridman puede no sonar familiar, pero es el dueño de la cadena de supermercados DIA. Además, es un oligarca e inversor ruso, cofundador de Alfa Bank, que llegó a ser el banco privado más grande de Rusia. Con este expediente a sus espaldas, y muchas dudas sobre sus actividades recientes, Fridman se ha declarado como víctima de 'Kompromat' por parte del gobierno británico. 

El 'kompromat' es una táctica rusa utilizada durante la Unión Soviética que consiste en conseguir información comprometedora sobre políticos o personas influyentes para poder chantajearlos, desacreditarlos o manipularnos más tarde, a menudo con fines políticos. Era una parte del manual básico de los agentes del KGB, la policía secreta rusa. 

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Fridman, cuyo patrimonio neto se estima, según la revista Forbes, en 12.600 millones de dólares, ha recibido sanciones británicas y de la Unión Europea desde marzo de 2022, un mes después de que Rusia invadiera Ucrania. Estas sanciones se deben a sus supuestos vínculos con el Kremlin. 

Mikhail Fridman fue detenido el pasado diciembre en su mansión en Londres bajo sospecha de blanqueo de dinero, conspiración para defraudar a la policía británica y conspiración para cometer perjurio.

Ese mismo mes, la mansión multimillonaria de Fridman en Londres fue registrada por una supuesta conspiración para evadir sanciones británicas, conspiración para defraudar al Ministerio del Interior, cometer perjurio y por blanquear dinero. 

Más tarde fue puesto en libertad bajo fianza. Dos hombres más fueron detenidos con él, según afirmaron fuentes del TASS. Los abogados del oligarca dicen que la orden se basó en acusaciones falsas, incluidas las afirmaciones de que financió el crimen organizado ruso, blanqueó dinero para cárteles colombianos de la droga o que estuvo involucrado en el asesinato de dos periodistas.

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Además, su abogado, Hugo Keith, alegó que la NCA ha abandonado su investigación sobre las supuestas conspiraciones para defraudar, cometer perjurio y el blanqueo de dinero desde que la policía entró en la casa de Fridman. 

A su vez, el abogado dijo que la investigación por una supuesta conspiración para eludir las sanciones británicas, que tienen relación con un préstamo hecho por Alfa Bank al asistente ejecutivo de Fridman, continúa. 

El argumento de la Agencia Nacional contra el Crimen, que sustenta que pagar un préstamo a alguien antes de que se impongan sanciones equivale a una evasión de las mismas, es legalmente incorrecto, según los abogados de Fridman. 

Ante esta respuesta, el multimillonario ha interpuesto una demanda legal contra la NCA, argumentando que la orden judicial para entrar en su casa se obtuvo ilegalmente y buscando que se anule. 

Niega las acusaciones

Mikhail Fridman de 59 años, niega rotundamente las acusaciones de irregularidades, que sus abogados dijeron al tribunal que eran "difamaciones gratuitas e injustificadas contra un hombre de negocios de buen carácter", según Reuters. 

El abogado Hugo Keith ha declarado en unos documentos judiciales que las acusaciones provienen de un informe de hace 15 años publicado por WikiLeaks en 2012, y que eran "absolutamente típicas del clásico kompromat, información dañina y falsa, recopilada y utilizada para crear publicidad negativa y ejercer influencia sobre el sujeto".

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Cathryn McGahey, de la NCA, dijo en unos documentos judiciales que la agencia acepta que "las fallas de su parte llevaron a que a búsqueda de la propiedad (de Fridman) y la incautación de artículos fueran ilegales".

Fridman argumenta que la orden también se obtuvo ilegalmente por otros motivos, ya que no había una base razonable para creer que hubiese cometido un delito penal, y además los agentes de los medios de comunicación de la NCA pudieron acceder a la casa, según la orden. 

Su caso será considerado en una audiencia completa durante el mes de noviembre, según ha dictaminado el juez Clive Lewis emitido este jueves.