Ucrania estrena sus misiles Neptuno con un ataque a la flota rusa del Mar Negro en Sebastopol

Fuentes ucranianas y canales de Telegram rusos como Baza y Shot confirmaron que esta ofensiva llevada a cabo con misiles de crucero ha dañado el buque de asalto anfibio Minsk y el submarino Rostov del Don. El Ministerio de Defensa ruso ha reconocido los daños, aunque no ha identificado los buques. Por otra parte, ha afirmado que ambas naves serán reparadas y puestas de nuevo en servicio.

El ataque contra el astillero de Sebastopol llevado a cabo este miércoles fue, según fuentes rusas y ucranianas, perpetrado con misiles de crucero y dejó 24 heridos. El ejército ucraniano considera que ha sido todo un éxito ya que se trata de la mayor agresión cometida -en Crimea- desde que comenzaran la contraofensiva en junio. El comandante de la Fuerza Aérea ucraniana, Mikola Oleshchuk, no ha querido perder la oportunidad de felicitar a sus pilotos por el "excelente trabajo de combate" realizado en el mar Negro.

Oleshchuk sacó pecho en su cuenta de Telegram, al afirmar que "los ocupantes aún se están recuperando de la explosión de anoche en Sebastopol", acompañando el texto con una fotografía del incendio provocado en el astillero, el más importante para Rusia porque en él se repara toda su flota del mar Negro.

Rusia ha intentado frenar el triunfalismo ucraniano al asegurar que de los 10 misiles y los tres drones marinos que lanzó Ucrania, el ejército ruso acabó con todos los drones e interceptó siete misiles. Pese a esta manifestación por parte de las autoridades del Kremlin, el éxito ucraniano es mayor ya que con tres misiles, Ucrania acabó con dos grandes barcos.

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El éxito ucraniano va más allá del ataque y es que los misiles de crucero que ha lanzado en Sebastopol son sus nuevos misiles Neptuno. Estos Neptuno son un armamento diseñado enteramente por Ucrania para atacar objetivos terrestres. Kiev hizo una demostración el 31 de agosto de estos misiles y todo apunta a que la producción y reserva es la suficiente para comenzar con su uso (como ha quedado demostrado).

La ventaja de estos Neptuno desarrollados por Ucrania es que no tienen las limitaciones de otras armas que envía Occidente y por lo tanto puede atacar libremente territorio ruso. Eso sí, todavía queda mucho desarrollo por hacer porque, pese a que el Secretario del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional, Alexei Danilov, amenazase con atacar Kamchatka o Kronstadt, parece que este tipo de objetivos están lejos de alcanzarse todavía.

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El trabajo ucraniano en el mar Negro ha sido importante en el último mes derribando defensas antiaéreas y atacando posiciones rusas. Pero la ofensiva de este pasado miércoles demuestra que si hasta ahora Rusia ha tenido serios problemas para contener los ataques con drones, la aparición de esta nueva amenaza resulta preocupante para los invasores.

La posición de Rusia también es complicada porque por Sebastopol y Crimea pasa todo, porque el Kremlin siempre ha intentado vender que esa posición era segura para la población y para el dominio en el mar Negro. Pero tras lo ocurrido este miércoles, su imagen queda muy dañada ante la vulnerabilidad que ha demostrado en una zona clave.

Reunión Kim-Putin

Este ataque se ha producido mientras Kim Jong-un y Vladimir Putin se encontraban reunidos en el cosmódromo de Vostochni, en la región siberiana de Amur, donde buscaban un acuerdo para el suministro de armamento y tecnología militar.

Según adelantó The New York Times, Putin pretendía que Corea del Norte vendiera a Rusia munición para artillería y misiles antitanques, mientras que Kim Jong-un estaba buscando tecnología avanzada para la fabricación de satélites y submarinos nucleares, además de producción petrolífera y ayuda alimentaria.

Al inicio de la reunión, el dictador norcoreano aseguró que apoya todas las decisiones del mandatario ruso. "Rusia se ha levantado ahora en una lucha santa para la defensa de su soberanía y seguridad. Nosotros siempre hemos apoyado y apoyamos todas las decisiones del presidente Putin", afirmó.

La comunidad internacional, desde EEUU a Asia, y Ucrania vigilan de cerca el desarrollo de la cumbre. Tanto es así que la Administración Biden ha recordado a ambos países "que cualquier transferencia de armas de Corea del Norte a Rusia violaría múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU".

"No dudaremos en imponer nuevas sanciones si corresponde", recalcaron tanto la Casa Blanca como el Departamento de Estado.