Las protestas contra la amnistía han llegado hasta Bruselas. Después de varios días con manifestaciones en toda España en las sedes del PSOE, la manifestación se ha trasladado hasta el hotel Sofitel.
El Sofitel es el hotel donde se suelen alojar todos los representantes políticos que viajan a Bruselas y es en el que se aloja Santos Cerdán, el número tres del PSOE, desde que viajase a la capital belga para negociar la amnistía con Puigdemont.
La protesta ha sido convocada por Revuelta en un bar de la Plaza de Luxemburgo, el Beer Factory, frente al Parlamento Europeo. Más tarde, la pequeña protesta ha recorrido las calles de Bruselas hasta llegar a las puertas del hotel donde han permanecido unos minutos para protestar contra la futura ley de amnistía.
Uno de los que han acudido a esta manifestación y que se le ve sujetando una pancarta en que la se puede leer "Sánchez protege a corruptos y terroristas. La unidad no está bajo votación" es Arturo Villa, asesor de Vox en el Parlamento Europeo.
Cabe recordar que Revuelta es un movimiento juvenil ligado a Vox que ya lideró las protestas en Ferraz los últimos días y que se constituyó hace tan sólo un mes acogiendo parte del sistema de Plataforma 711.
Además, tras haberse conocido que el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, ha pedido información "detallada" al Gobierno en funciones sobre la ley de amnistía, sobre la que considera que existen "serias preocupaciones", las redes sociales de Revuelta han llamado a una manifestación paralela en Madrid y Bruselas en las sedes del Parlamento Europeo.
En esta manifestación con doble sede se pedirá a la Unión Europea que pare la ley de amnistía, una protesta muy similar a las que se están viviendo en las sedes del PSOE en las que se pide a Sánchez elecciones y que no llegue a más acuerdos con los independentistas.
Mientras tanto, el PSOE ha enfriado las negociaciones por la investidura y pese a que Puigdemont y Cerdán siguen negociando, la Ley de Amnistía sigue atascada desde hace días por los desacuerdos sobre sus potenciales beneficiarios.
Además, ambos negociadores -separados por escasos metros entre sus hoteles- no han vuelto a reunirse cara a cara desde su encuentro del 30 de octubre en el despacho del expresidente catalán en la Eurocámara, con la foto de una urna del referéndum ilegal 1-O como telón de fondo. La negociación se lleva a cabo de forma virtual e intercambiando documentos.