El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, junto a Zelenski este martes en Kiev.

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, junto a Zelenski este martes en Kiev. Reuters

Europa

Orbán, aliado de Putin, llega a Kiev en su primera visita a Ucrania desde la invasión rusa en 2022

Desde febrero de 2022, el primer ministro de Hungría no había pisado suelo ucraniano, como sí han hecho decenas de dirigentes internacionales. 

2 julio, 2024 12:42

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbn, ha viajado este martes a Kiev para reunirse con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, en la que supone su primera visita a territorio ucraniano desde el inicio de la invasión rusa, desatada en febrero de 2022 por Vladimir Putin.

"Orbán ha llegado a Kiev esta mañana para discutir una paz europea con el presidente Zelenski", ha dicho el portavoz del Gobierno húngaro, Zoltan Kovacs, a través de un mensaje publicado en redes sociales.

Así, ha especificado que "las conversaciones se centrarán en las posibilidades de lograr la paz, así como en los problemas actuales en las relaciones bilaterales entre Hungría y Ucrania", sin que Orbán, el político más cercano de Putin entre los
Estados miembro de la UE, haya hecho por ahora declaraciones públicas.

Orbán, un referente internacional de la extrema derecha y con posturas euroescépticas, realiza esta visita a Ucrania un día después de asumir su país la presidencia rotatoria y semestral de la Unión Europea, algo que incomoda a muchos países en el bloque por la deriva antidemocrática del primer ministro húngaro.

Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Hungría ha demostrado ser el principal aliado de Moscú dentro de la UE, cuestionando la eficacia de las sanciones y ralentizando la adopción de medidas de apoyo a las autoridades ucranianas, si bien no ha llegado a tumbar ninguna iniciativa.

Desde que Rusia lanzó la invasión de Ucrania en febrero de 2022, esta es la primera vez que el jefe del Gobierno magiar viaja a Ucrania, país que sí fue anteriormente visitado por la expresidenta Katalin Novák.

Las relaciones de los dos Gobiernos están cargadas de roces. Kiev ve en Budapest un aliado de Moscú, mientras que Hungría acusa a Ucrania de no respetar los derechos de la minorías étnicas que viven en su territorio, entre ellas la magiar, de unas 150.000 personas.

La visita de Orbán no se esperaba, ni fue anunciada previamente, aunque evidentemente ya estaba planeada, tal y como se desprende de unas crípticas declaraciones efectuadas la víspera por el primer ministro magiar en una entrevista con la televisión pública M1.

"Si mañana (o sea hoy) se fijan en la prensa, verán cómo se dan los primeros pasos" hacia la paz, respondió Orbán a una pregunta sobre las posibilidades que tendría Hungría para lograr el fin de la guerra en Ucrania.

En este contexto, reiteró su convicción de que si el candidato republicano y expresidente Donald Trump gana las elecciones de noviembre en su país y vuelve a la Casa Blanca, impulsará una solución negociada al conflicto.

"El mayor problema de Europa actualmente es la guerra entre Ucrania y Rusia" y el continente debe prepararse las negociaciones entre Moscú y Washington que empezarán tras la victoria electoral de Trump en Estados Unidos, subrayó.