División en la derecha radical: Le Pen y Salvini se suman al grupo de Orbán, que supera a Meloni

Con estas dos últimas incorporaciones, Patriotas por Europa sumaría un total de 84 eurodiputados de 12 Estados miembros diferentes y se convierte en el tercer mayor grupo de la Eurocámara, solo superado por el PPE y los socialistas. El grupo de Orbán adelanta así a los Conservadores y Reformistas Europeos de Giorgia Meloni, que tras el abandono de los seis representantes de Vox cae hasta los 78 eurodiputados.

Al final, las fuerzas de derecha radical han sido incapaces de crear un gran supergrupo único en la Eurocámara, un fracaso que el propio Orbán atribuye a la rivalidad entre Le Pen y Meloni. Como ya ocurriera en la anterior legislatura, las divisiones internas entre las fuerzas ultra limitarán su capacidad de influencia real en la UE. "Eso no quiere decir que los puentes se hayan cortado o que no haya contactos (entre Le Pen y Meloni). Las cosas evolucionan en el buen sentido", ha dicho el portavoz de Agrupación Nacional, Jean-Paul Garraud.

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La entrada de Le Pen y de Salvini en el grupo de los Patriotas ha sido anunciada este lunes por el Gobierno húngaro. "Esta nueva facción de derecha aspira a ser una fuerza decisiva en la configuración del futuro de Europa. ¡Unamos fuerzas y luchemos juntos por un futuro mejor!", ha dicho su portavoz, Zoltan Kovacs. Sus dos prioridades programáticas son combatir la creación de un "super Estado europeo" y reforzar las fronteras exteriores y la lucha contra la migración ilegal.

El candidato de Agrupación Nacional a primer ministro, Jordan Bardella, ya lo había anticipado en su discurso de la derrota este domingo. "En el Parlamento Europeo nuestros eurodiputados jugarán desde mañana plenamente su papel dentro de un gran grupo que pesará en las relaciones de fuerza en Europa para rechazar la sumersión migratoria, la ecología punitiva y la confiscación de nuestra soberanía", dijo Bardella. 

La reunión de constitución de Patriotas por Europa en la Eurocámara Gobierno húngaro

El partido de Le Pen es, con diferencia, el que más eurodiputados aporta a Patriotas por Europa, un total de 30. Por eso el presidente del grupo será el propio Bardella. Le siguen los húngaros de Fidesz (11); la Liga de Salvini (8); la Acción de los Ciudadanos Insatisfechos (ANO) de República Checa (7); los austriacos del FPÖ, los holandeses de Geert Wilders y Vox (6 cada uno); los flamencos del Vlaams Belang (3), los portugueses de Chega y la coalición checa Oath and Motorists (2 cada uno) y el Partido Popular Danés, Letonia Primero y los griegos de Voz de la Razón (1 cada uno).

En realidad, los Patriotas por Europa representan una evolución del grupo que lideraba Le Pen en la anterior legislatura, Identidad y Democracia. El cambio más importante es que sale Alternativa por Alemania, expulsados por la propia Le Pen por considerarlos excesivamente radicales; y entran Fidesz, que militaba en los no inscritos tras salir del Partido Popular Europeo, Vox (que ocupará una vicepresidencia con Hermann Tertsch) y ANO (que hasta ahora militaba en los liberales de Renew). Por el camino, Orbán ha arrebatado a la francesa su condición de líder indiscutible del grupo.

Viktor Orbán y Matteo Salvini, en una imagen difundida por el Gobierno húngaro Gobierno húngaro

En la anterior legislatura, el resto de fuerzas políticas aplicaron una especie de cordón sanitario a Identidad y Democracia, impidiendo a sus eurodiputados el acceso a las vicepresidencias de la Eurocámara o a presidencias de comités. No obstante, no está claro que este veto pueda sobrevivir una vez que ha cambiado de nombre y se ha convertido en el tercer mayor grupo del Parlamento.

La principal línea divisoria entre los Conservadores y Reformistas de Meloni y los Patriotas de Orbán es su posición frente a Rusia. La primera ministra italiana (y sus principales socios, los polacos de Ley y Justicia) siempre han apoyado a Ucrania y a la OTAN y han exhibido una línea dura frente al Kremlin.

En contraste, el primer ministro húngaro se niega a prestar ayuda militar al Gobierno de Volodímir Zelenski y ha mostrado su cercanía a Vladímir Putin en su visita a Moscú la semana pasada, aprovechando la plataforma que le ofrece la presidencia húngara del Consejo de la UE y desafiando al resto de Estados miembros.

"Llamemos a las cosas por su nombre. Los Patriotas por Europa sirven a los intereses de Rusia. Ya sea consciente o inconscientemente. Y así ponen en riesgo la seguridad y la libertad de Europa", ha dicho el primer ministro checo, Petr Fiala, que pertenece a la familia de los Conservadores y Reformistas.