El presidente francés, Emmanuel Macron, ha rechazado "por el momento" la dimisión inmediata del primer ministro, Gabriel Attal, a la espera de que las fuerzas políticas acuerden un candidato tras las elecciones legislativas de este domingo. Attal presentó este lunes su dimisión como primer ministro al mandatario, pero seguirá en el cargo hasta que Macron tenga propuestas de relevo. 

El presidente francés ha recibido este lunes por la mañana al primer ministro en el Palacio del Elíseo y le ha pedido que continúe en el cargo para garantizar "la estabilidad del país". No hay ningún plazo.

El relevo de Attal como líder del Gobierno es una incógnita tras los resultados de este domingo. La alianza de izquierdas, Nuevo Frente Popular, ganó las elecciones, pero no alcanza la mayoría absoluta. En segundo lugar quedaron los partidos de centro liberales, comandados por Macron. Y en tercer lugar el Reagrupamiento Nacional de ultraderecha de Marine Le Pen. 

El Nuevo Frente Popular ha asegurado que esta misma semana propondrá a Macron un candidato. Y ha advertido de que no gobernarán junto al presidente francés, sino que lo harán con su programa de forma individual, pese a que no tienen mayoría en la Asamblea Nacional y la capacidad de las fuerzas políticas de llegar a acuerdos va a ser imprescindible. 

El primer ministro francés ya había avanzado tras conocerse anoche los resultados de la segunda vuelta de las legislativas, en las que su grupo perdió la mayoría relativa con la que había gobernado, que presentaría la dimisión pero que podría seguir en funciones "tanto tiempo como el deber lo exija".

Sobre todo, teniendo en cuenta que Francia organiza los Juegos Olímpicos de París, que van a celebrarse del 26 de julio al 11 de agosto, y que representan un desafío. Sobre todo en cuanto a la seguridad, un tema muy presente en la campaña electoral y del que el Reagrupamiento Nacional, el partido de ultraderecha de Marine Le Pen, saca provecho. 

Macron, por su lado, aseguró anoche que iba a tomarse tiempo para examinar los resultados de los comicios y comprobar "la estructuración de la nueva Asamblea Nacional". A partir de ahí decidiría sobre el Gobierno que se pueda constituir.

El jefe del Estado, que en Francia es quien nombra al primer ministro -aunque luego éste tiene que responder ante la Asamblea Nacional, ya que la Cámara lo puede tumbar con una moción de censura-, aseguró que "en su papel de garante de las instituciones, velará para que se respete la decisión soberana de los franceses".

Está por ver si en esta nueva fase provisional se mantiene la misma estructura del Gobierno, con los principales puntales que son el ministro del Interior, Gérald Darmanin, responsable del dispositivo de seguridad en los Juegos Olímpicos, o el de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire.