"El Gobierno de Su Majestad de Gibraltar está decepcionado al observar que varios jugadores de la selección masculina de fútbol de España celebraron su victoria en la Copa de Europa con cánticos de comentarios rancios sobre Gibraltar", así ha expresado su descontento Gibraltar, territorio británico en suelo español, por los cánticos entonados durante la celebración de la Eurocopa en Cibeles.
"Se trata de una mezcla totalmente innecesaria de un gran éxito deportivo con declaraciones políticas discriminatorias que resultan enormemente ofensivas para los gibraltareños", contía dictando el comunicado del Gobierno gibraltareño.
Además, consideran "lamentable" que la Selección utilice "la plataforma de celebración para promover la idea de usurpar el territorio de Gibraltar" una actitud, consideran, es "contraria al principio de que el deporte no debe utilizarse para promover ninguna ideología políticamente controvertida".
Los 26 internacionales esperaban a salir al escenario y comenzaron a gritar "Gibraltar es español", un cántico muy repetido durante estos días por la afición durante la previa y la final de la Eurocopa ante Inglaterra.
Lo más sorprendente de todo es que al cántico, los saltos y el baile se unió José Luis Martínez-Almeida, el alcalde de Madrid que gritó y saltó como uno más de la plantilla de la Selección.
No fue la única vez que los internacionales repetirían el cantico, Álvaro Morata, el maestro de ceremonias de la noche, repitío el cántico durante la presentación de sus compañeros.