El aeropuerto de Frankfurt, el más transitado de Alemania, ha suspendido durante varias horas todos los vuelos después de que un grupo de activistas climáticos irrumpieran de madrugada en las pistas y obligaran a cancelar todas las salidas y llegadas. De los 1.400 vuelos previstos, se han cancelado unos 140.

La Policía ha detenido a ocho activistas climáticos del grupo Letzte Generation (Última Generación).

"Se solicita a los pasajeros que no vayan al aeropuerto por el momento", anunciaban a primera hora de este jueves en redes sociales los responsables del aeropuerto, que aconsejan a los viajeros que verifiquen el estado de su vuelo y calculen tiempo adicional para el viaje.

A las 10:30 horas se informaba de que "las operaciones de vuelo vuelven a estar operativas". "Estamos haciendo todo lo posible para sacar a los activistas climáticos de la pista", informa AFP según un portavoz de la policía.

Según el grupo activista climático, seis de sus miembros cortaron el alambre de seguridad que rodea el aeropuerto para dirigirse “a pie, con bicicletas y patinetas a diferentes puntos alrededor de las pistas”.

En las pistas exhibieron carteles con la leyenda "El petróleo mata" para exigir a los políticos "un acuerdo internacional jurídicamente vinculante para eliminar progresivamente el petróleo, el gas y el carbón en todo el mundo antes de 2030 para poner fin a las muertes masivas causadas por alimentar la catástrofe climática".

La acción ha generado amplias condenas, no solo del aeropuerto, que recalcó que se reserva el derecho de emprender acciones legales y resaltó que los activistas ponen en peligro las operaciones de vuelo y, en última instancia, vidas humanas, también de políticos "de todos los colores" en Alemania.