Un "militante de ultraizquierda" de 28 años fue detenido este domingo en la ciudad francesa de Rouen por su posible implicación en el sabotaje a gran escala contra los servicios de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF) el pasado viernes, el mismo día en el que arrancaron oficialmente los Juegos Olímpicos de París.
El ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, ya apuntó esta mañana a la posible vinculación de la "ultraizquierda" y la información de la detención ha trascendido a lo largo de la mañana. Las autoridades vieron al joven de 28 años comportarse de forma extraña cerca de las vías en Rouen y decidieron detenerle para interrogarle.
"Hemos identificado un cierto número de perfiles, de personas que podrían haber cometido este sabotaje", ha señalado inicialmente Darmanin durante una entrevista para la cadena France2, donde al poco ha señalado que el 'modus operandi' del ataque es "el modo de acción tradicional de la ultraizquierda".
Cuestionado directamente sobre la vinculación de la extrema izquierda en lo ocurrido, el ministro Darmanin ha abogado por "tener cuidado" con estas cuestiones, porque por el momento se desconoce hasta que punto los autores del sabotaje "han sido manipulados o (actuaron) por cuenta propia".
A pesar de aquella incidencia, que sembró el caos durante gran parte del día en el sistema ferroviario, el ministro del Interior ha destacado que los Juegos Olímpicos se desarrollan en completa situación de seguridad, incluida la ceremonia inaugural, que por primera vez se realizó fuera de un estadio, a lo largo del río Sena.