Rusia dice que el ataque de Ucrania a Kursk viola los derechos humanos y Minsk blinda la frontera

El presidente Zelenski dijo que Ucrania había lanzado una incursión en territorio ruso para "restaurar la justicia" en su primer reconocimiento de la sorpresiva ofensiva de Kiev. Se ha convertido en la mayor intromisión ucraniana en suelo ruso desde el inicio de la guerra, con la que sólo han conseguido ocupar -como máximo- varias decenas de kilómetros cuadrados de territorio ruso (en comparación a los más de 100.000 kilómetros cuadrados del territorio internacionalmente reconocido de Ucrania controlados por Rusia).

Casi simultáneamente se abría un nuevo frente en la frontera con Bielorrusia, después de que su presidente, Alexandr Lukashenko, denunciara una violación de su espacio aéreo por drones ucranianos. "Sospechamos que se trata de drones de ataque. Violando el espacio aéreo de Bielorrusia, volaron desde Ucrania", aseguró Lukashenko. Por este motivo Minsk decidió reforzar con tropas su frontera y anunció duras represalias si Kiev volvía a provocarles.

Movilización de la guerra

Tras los primeros ataques en la región rusa de Kursk, el Kremlin se apresuró a evacuar a los residentes e impusieron un amplio régimen de seguridad en tres regiones fronterizas. El Ministerio de Defensa de Rusia anunció que desde el comienzo de los combates en Kursk "el enemigo perdió a hasta 1.350 hombres y 29 tanques", además de otros equipos bélicos.

Zelenski, en su vídeo diario, dijo que había discutido la operación con el alto comandante ucraniano Oleksandr Syrski, y prometió responder de la misma manera después de que Rusia lanzara su invasión a gran escala de su vecino en febrero de 2022.

"Hoy recibí varios informes del comandante en jefe Syrski sobre las líneas del frente y nuestras acciones para empujar la guerra al territorio del agresor", dijo el sábado por la noche el líder ucraniano. "Ucrania está demostrando que realmente puede restablecer la justicia y está garantizando exactamente el tipo de presión que se necesita: presión sobre el agresor", sentenció. 

El Ministerio de Defensa de Rusia dijo el domingo que habían destruido 14 drones ucranianos y cuatro misiles balísticos tácticos Tochka-U en Kursk, y 18 drones sobre otras regiones rusas que Ucrania ataca frecuentemente. En un comunicado, calificó de "bárbara" la incursión terrestre, que según analistas militares tomó al Kremlin por sorpresa, y dijo que no tenía sentido militar.

Edificio de apartamentos dañado por un misil lanzado desde Ucrania en Kursk (Rusia). Reuters

El gobernador interino de Kursk, Alexei Smirnov, ordenó a las autoridades locales acelerar la evacuación de civiles en las zonas de riesgo. El sábado, la agencia de noticias estatal rusa TASS informó que más de 76.000 personas habían sido evacuadas.

Minsk en alerta

El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, acusó el sábado a Ucrania de violar el espacio aéreo de Bielorrusia, donde fueron derribados varios aparatos aéreos. "Sospechamos que se trata de drones de ataque. Violando el espacio aéreo de Bielorrusia, volaron desde Ucrania", aseguró Lukashenko.

Señaló que las autoridades bielorrusas avisaron a sus colegas rusos sobre unos drones que volaban en dirección a la frontera rusa y que finalmente fueron derribados por las fuerzas de Moscú en el cielo de la región de Yaroslavl.

Horas más tarde el ministro de Defensa de Bielorrusia, Víktor Jrenin, anunció que el país eslavo reforzará sus tropas en la frontera con Ucrania por decisión de Lukashenko. "El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas dio instrucciones para reforzar la agrupación de tropas en las direcciones tácticas de Gómel y Mozir, declaró Jrenin. Agregó que la medida se tomó "teniendo en cuenta la situación que se desarrolla en Ucrania, así como en la región rusa de Kursk".