Agencias

El multitudinario carnaval de Notting Hill ha puesto el punto y final este lunes ante la vigilancia de miles de agentes de la Policía Metropolitana (Met) de Londres, que este año ha registrado incidentes de "violencia inaceptable" por el apuñalamiento de tres personas.

El popular evento, al que acuden cientos de miles de personas cada año, se saldó en su jornada inaugural del domingo, dedicada a los niños, con tres apuñalamientos, entre ellos el de una mujer de 32 años que había acudido con su hijo pequeño y que se encuentra en "situación crítica".

Los otros dos heridos por cuchilladas son dos hombres, de 29 y 24 años, según confirmó la Met, cuyos agentes han detenido hasta la fecha en esta edición del carnaval a 103 personas por cometer delitos que incluyen agresiones a trabajadores de emergencia, agresiones, posesión (de estupefacientes) con intención de suministro, delitos de carácter sexual y robos. La Met informó asimismo de que 18 de sus agentes han sido agredidos hasta la fecha.

"Cientos de miles de personas han acudido al carnaval de Notting Hill para disfrutar de una celebración fantástica y nuestros agentes están de servicio, trabajando para mantenerlos seguros como parte de una operación policial cuidadosamente planeada", apuntó el cuerpo en un comunicado.

La policía agregó que "lamentablemente, una minoría ha venido a cometer delitos e involucrarse en actos violentos".

El subcomisario del cuerpo, Ade Adelekan, a cargo de las operaciones de vigilancia, lamentó hoy la "violencia inaceptable que ensució el primer día" y comentó que los agentes "evitaron por muy poco una fatalidad" en alusión a los tres apuñalamientos.

"Se suponía que ayer era una jornada dedicada a la familia, una celebración adecuada a todas las edades. Estamos cansados de decir las mismas palabras cada año. Estamos cansados de decirle a las familias que sus seres heridos han sido heridos de gravedad o algo peor. Estamos cansados de ver escenas de delitos en el carnaval", dijo.

La Met ha abierto este año un hilo en su cuenta de X donde proporciona información e indicaciones sobre cómo actuar en caso de producirse incidencias.

Entre sus mensajes, la policía insta a los visitantes al carnaval a que "si tienen información que pueda ayudar a evitar incidentes antes de que estos ocurran" se pongan en contacto de manera anónima con el cuerpo o con la organización Crimestoppers.

Agentes de policía hacen guardia durante el desfile del Carnaval de Notting Hill, en Londres. Reuters

Celebración de la cultura caribeña 

Al margen de estos episodios violentos, entre algunos de los participantes de las celebraciones, la escocesa Jo resaltó en declaraciones a EFE la importancia de "celebrar la cultura y la diversidad, y de dónde vienes", mientras que otro de los ciudadanos que acudió hoy a Notting Hill, Christopher, afirmó que lleva viniendo tres décadas y no tiene intención de parar.

"Yo vengo a pasármelo bien me gustan las diferentes nacionalidades, que todo el mundo está junto... Yo me lo paso genial; llevo viniendo probablemente unos 30 años y no voy a parar. Me gusta el tipo de música diferente, las personas diferentes", señaló.

También Sabrina (otra de las visitantes) remarcó a EFE el buen ambiente en general que se vive: "Me parece alucinante, la vibración, la energía, el amor" y añadió que si bien "hay personas que no quieren formar parte de la diversión (en alusión a los incidentes violentos), a la mayoría le está encantando".

Varias participantes en el carnaval de Notting Hill. Reuters

Desde 1996, y a excepción del parón de la pandemia de 2019 a 2021, el evento celebra la cultura caribeña, 76 años después de que empezaran a llegar a este país los primeros inmigrantes del Caribe en la posguerra.

Esa llamada "generación Windrush" dejó una fuerte huella en el Reino Unido cuando al terminar la II Guerra Mundial, este país pidió ayuda a sus colonias para reconstruirse del daño de los bombardeos nazis, a cambio de trabajo y una nueva vida.