Una treintena de líderes mundiales y ningún español: España no estará representada en la reapertura de Notre Dame

España es el único gran país europeo que no estará representado en la reapertura solemne de la catedral de Notre Dame esta tarde 7 de diciembre. Tanto la Casa Real como el Ministerio de Cultura, declinaron la invitación oficial del gobierno francés, según ha podido conocer EL ESPAÑOL de fuentes ofíciales. Al no ser delegables las invitaciones, ninguna autoridad española estará presente en París. Resulta sorprendente esta ausencia en el que, sin duda, va a ser uno de los hitos informativos del año.

Otras dos ausencias de nota serán las del Papa y la de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Está última ha cancelado su asistencia a última hora. Quizá por el mal momento que atraviesan sus relaciones con el presidente de la república, Emmanuel Macron. Francia se opone al Tratado de Libre Comercio entre la UE y el Mercosur que la presidenta de la Comisión acaba de cerrar.

La ausencia del Papa Francisco sí ha levantado alguna ampolla en el Elíseo. Francisco ha remitido un texto que será leído esta tarde en la catedral. Desde Roma se excusan en la salud del Pontífice para declinar la invitación de Macron.

Trump viajará a París para asistir al acto de reapertura de Notre Dame: será su primer viaje como presidente electo

Pero parece evidente que la serie inaugural con todo el boato francés no acaba de gustar en el Vaticano. El Papa sí ha confirmado que tomará parte la semana próxima en una jornada en Córcega sobre el mediterráneo. Francisco viajará el mismo día desde Roma y regresará por la noche al Vaticano. Lo que era imposible a todas luces desde París.

La monarquía inglesa ha enviado al príncipe Guillermo. Sí estarán los reyes de Bélgica, Philippe y Mathilde, y el príncipe Alberto de Mónaco.

Los presidentes de Italia, Sergio Mattarella, Alemania, Frank-Walter Steinmeier, Polonia Andrzej Duda, Croacia, Zoran Milanovic, Bulgaria, Rumen Radev, Estonia Alar Karis, Finlandia, Alexander Stubb, Lituania, Gitanas Nauseda. Grecia, Katerina Sakellaropoúlou y Ucrania, Volodímir Zelenski sí han confirmado su presencia esta tarde en la ceremonia que presidirá el arzobispo de París, Laurent Ulrich.

También estarán presentes el primer ministro armenio, Nikol Pachinian la presidenta de Georgia, Salomé Zourabichvili, el primer ministro serbio, Milos Vucevic, y la presidente de Kosovo, Vjosa Osmani.

Vuelve el resplandor a Notre Dame con la música de Gustavo Dudamel y los tapices de Miquel Barceló

El invitado más llamativo a la ceremonia será, sin duda, el presidente electo de EEUU, aunque aún no ha tomado posesión de su cargo, Donald Trump, en el que será su primer viaje al extranjero. Su presencia, entusiasta a juzgar por sus comentarios en su propia red social, Truth Social, es sin duda, un tanto para Macron quien, durante el primer mandato de ambos, mantuvo una relación intensa con sus altos y bajos con el líder americano. El actual presidente, Joe Biden, será representado por su esposa, Jill Biden.

Varios dignatarios africanos también han comunicado su asistencia. Entre ellos, el presidente del Congo, Denis Sassou Nguesso, el presidente de la República democrática del Congo, Félix Tshisekedi, el de Gabón, Brice Oligui Nguema y el de Togo Faure Gnassingbe.

La reapertura de la catedral de París tiene tres secuencias. La primera, en la tarde del sábado 7, es considerada laica o institucional. En el acto hablará el presidente de la República. Después de varios tiros y aflojas se había decidido que lo hiciera fuera de la catedral pero, en razón del mal tiempo que se espera esta tarde en la capital francesa, lo hará desde el interior. Como él quería.

Conviene saber que el propietario de Notre Dame, y de todas las catedrales de Francia, es el Estado, desde las leyes de separación entre la iglesia y el Estado de principios del siglo XX. En concreto, las catedrales dependen de la administración central y las iglesias de los municipios. La iglesia católica viene a ser el inquilino perpetuo de los templos.

Por eso, el dinero recogido en la campaña de donaciones (846 millones) ha servido para restaurar el edificio pero la diócesis de París ha tenido que buscar otras fuentes de financiación para el nuevo sistema de iluminación, las sillas, el altar y el mobiliario litúrgico.

Tras la reapertura oficial, en la noche del mismo sábado, tendrá lugar la parte cultural con un concierto en la explanada de la catedral. Y finalmente, el domingo por la mañana tendrá lugar la primera misa, tercer tiempo, el religioso. Oficiará el arzobispo de París, tras la consagración del altar.

El presidente de la República, y numerosos invitados oficiales, participarán en el oficio. Fuentes del Elíseo comunicaron hace unos días a la agencia France Presse que “nada prohíbe al presidente de la República asistir, a título personal o en su calidad de presidente, a oficios religiosos”. añadieron que eso sí “el presidente no comulga nunca”.