Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, Servicio de Seguridad ucranianos (el SUB) han llevado a cabo ataques en territorio ruso contra personalidades que apoyaban la guerra.
En su mayoría, estos ataques han implicado artefactos explosivos, y los objetivos han ido desde militares y especialistas en fabricación de armamento hasta periodistas y escritores vinculados con las autoridades o con grupos ultranacionalistas.
El último ha sido el teniente general Ígor Kirílov, jefe de la defensa radiológica, química y biológica, que ha muerto este martes al explotar una bomba colocada en un patinete eléctrico que estaba aparcado junto a su coche, frente a su domicilio en la capital rusa en Moscú.
De acuerdo con el Comité de Instrucción de Rusia, la bomba fue detonada cuando Kirílov, de 54 años, salía de su domicilio acompañado de su ayudante, que también ha muerto en la explosión. Una fuente anónima del SUB, citada por la agencia pública de noticias Ukrinform, ha reivindicado la autoría ucraniana del atentado.
Previamente, los fiscales ucranianos acusaron a Kirillov en ausencia por haber ordenado el presunto uso de armas químicas prohibidas en Ucrania, según una información que publicaba el diario Kyiv Independent. Acusaciones que Rusia negó de forma tajante.
Kirílov, que tenía previsto dar una rueda de prensa, es la figura más relevante asesinada por Kiev en territorio ruso desde febrero de 2022, recoge Efe. No es, sin embargo, el único.
Shatski, experto en misiles
Hace menos de una semana, el 12 de diciembre, fue asesinado a tiros en un parque de la región de Moscú el científico ruso Mijaíl Shatski, que trabajaba en una compañía que desarrolla misiles para el Ejército.
Fuentes de los servicios secretos ucranianos precisaron que Shatski trabajaba en la modernización de los misiles Kh-59 y Kh-69, con los que Moscú golpea habitualmente territorio ucraniano.
Además de trabajar en la mejora de los misiles de crucero, también participaba activamente en el desarrollo de nuevos drones de asalto para su empleo en la conocida como operación militar especial.
La hija de Duguin
Otro atentado con bomba acabó en agosto de 2022 con la vida de la periodista Daria Dúguina cuando circulaba en su coche en las afueras de Moscú.
Según se supo después, el atentado tenía como objetivo a su padre, Alexandr Duguin, líder del movimiento eurasianista que tiene muchos seguidores en círculos ultranacionalistas partidarios del restablecimiento del Imperio ruso.
El Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia acusó a los servicios secretos de Ucrania de perpetrar el atentado, tras lo que detuvo en ausencia a la ciudadana ucraniana Natalia Vovk, que logró darse a la fuga.
Un bloguero militar
En abril de 2023 un atentado con explosivos (TNT) en una cafetería en San Petersburgo costó la vida al bloguero militar Vladlen Tatarski, cuyo nombre real era Maxim Fomín.
El bloguero se hizo famoso al publicar un vídeo sobre Ucrania durante una ceremonia en el Kremlin en el que dijo: "Venceremos a todos, mataremos a todos, robaremos a todos según sea necesario. Tal como nos gusta".
Más de una treintena de personas resultaron heridas en el establecimiento, que era propiedad del jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, muerto durante un misterioso accidente de avión tras rebelarse contra la cúpula del Kremlin.
La policía detuvo a una residente de San Petersburgo, Daria Trepova, quien fue condenada a 27 años de cárcel por haber entregado a Tatarski el explosivo dentro de una estatuilla.
Propagandista en el frente
En mayo de 2023 resultó herido grave en un atentado con bomba el popular escritor nacionalista Zajar Prilepin, que combatió en el Donbás en las filas separatistas.
Prilepin, que sufrió graves heridas en ambas piernas, logró sobrevivir, pero en el atentado murió su conductor, Alexandr Shubin, cuando viajaban por la región de Nizhni Nóvgorod.
El presidente ruso, Vladímir Putin, condecoró con la Orden al Valor al literato, que sufrió el atentado después de firmar un contrato con la Guardia Nacional para volver a combatir en Ucrania.
Además, los servicios especiales ucranianos han acabado con numerosos funcionarios o figuras públicas aliadas del Kremlin en las cuatro regiones ilegalmente ocupadas y anexionadas ucranianas por Rusia en septiembre de 2022 (Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia)