Varios vídeos difundidos en redes sociales la tarde del jueves muestran cómo las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) han detenido a cerca de 70 hombres palestinos que se han entregado a las tropas israelíes en el norte de Gaza. Las grabaciones muestran a los detenidos semidesnudos, con los ojos vendados, maniatados y arrodillados o sentados en las calles del norte de la Franja, con su ropa y sus zapatos tirados a pocos metros. En otro vídeo se ve a un grupo de ellos siendo transportados en la parte trasera de un vehículo militar israelí. Una fotografía los muestra arrodillados en medio de un páramo.
Aunque las imágenes y los vídeos no han sido verificados por fuentes independientes, algunos medios israelíes sugieren que representan controles militares en busca de posibles "terroristas". El diario israelí Haaretz asegura que son posibles sospechosos de pertenecer a Hamás, pero ninguna fuente oficial ha confirmado que estos hombres no sean civiles de Jabaliya. Ante la consulta de Efe, el Ejército israelí afirmó que proporcionaría detalles sobre la situación en breve. Varios periodistas locales en la Franja de Gaza comentaron algunas de las imágenes, indicando que se trata de civiles capturados en localidades como Beit Lahia. Según Al-Jazeera, fueron sacados de escuelas gestionadas por la ONU que sirven de refugio en el norte de Gaza.
Uno de los individuos identificados en las fotos es Diaa Al-Kahlot, periodista y jefe de la oficina del periódico Al-Arabi Al-Jadeed en Gaza. El experto financiero y profesor universitario Ramy Abdu publicó el siguiente mensaje en X después de ver a su compañero en las imágenes: "Entre estos detenidos se encuentra mi querido amigo y veterano periodista Diaa Al-Kahlot. Le había rogado que abandonara Beit Lahia y se fuera al sur de Wadi Gaza [una reserva natural que divide la Franja en dos], pero me dijo que cómo iba a dejar a su querida Nada y a su anciana madre. Su hija, Nada, es discapacitada y necesita cuidados y equipos especiales para poder sobrevivir. Mi corazón es para Diya, mi corazón es para Nada", lamentó.
Este jueves, Israel bombardeó Jabalia, un campo de refugiados de 1,4 kilómetros cuadrados al sur de Beit Lahia donde vivían más de 115.000 personas al comienzo de la guerra, según la ONU. A pesar de las órdenes de evacuación, las autoridades locales dirigidas por Hamás afirman que decenas de miles de residentes permanecen en la zona en pésimas condiciones. La madrugada del jueves, las FDI ya habían declarado el asalto de un "complejo" de Hamás en Jabalia. En la operación mataron a varios hombres armados y localizaron una red de túneles, una zona de entrenamiento y un depósito de armas.
El ataque a Jabalia y la detención masiva cerca de Beit Lahia apunta que, aunque Israel haya trasladado el foco de su operación terrestre al sur de la Franja, el asedio al norte sigue en marcha. Durante el día del jueves, cientos de tanques rodearon Jabalia, según la BBC. La autoridad local, dirigida por Hamás, declaró que unas 100.000 personas siguen en el campo sin un hospital que funcione y en peligro de inanición. Al norte de Gaza no llega ayuda desde que expiró la tregua humanitaria que, durante una semana, permitió el paso de algo de comida y combustible.
El director general del Ministerio de Sanidad dirigido por Hamás, el doctor Munir Al-Bursh, declaró: "Ayer cavamos una fosa común en el mercado de Jabalia para más de 100 mártires, cuyos cuerpos se pudrían en el asediado hospital Kamal Adwan. "Todos los hospitales del norte están fuera de servicio, incluido el último hospital en funcionamiento, Kamal Adwan, que fue intensamente bombardeado por proyectiles de artillería". La noche del jueves, varios civiles reportaron el uso de gas y bombas de fósforo blanco ―prohibidas internacionalmente― contra este campamento de refugiados.
Jabalia, una de las áreas más densamente pobladas de la Franja, ya ha sido fuertemente atacada por Israel desde que empezó la invasión a Gaza. El pasado 31 de octubre, las autoridades palestinas dieron cuenta de "más de 50 mártires y cerca de 150 heridos y decenas de personas bajo los escombros debido a una atroz masacre israelí que golpeó una amplia zona de viviendas en el campamento de Jabalia".