Al menos cuatro empleados yemeníes murieron este viernes en un ataque "terrorista" con dron lanzado por un grupo desconocido contra el yacimiento de gas de Khor Mor, en la provincia de Suleimaniya del Kurdistán iraquí, informó el Gobierno kurdo.
El portavoz del Gobierno del Kurdistán iraquí, Peshawa Hawramani, dijo en un comunicado que el "acto terrorista" provocó la muerte de "cuatro empleados de nacionalidad yemení" así como "daños severos" que afectan en gran medida al suministro de energía de región semiautónoma del norte de Irak.
El portavoz se limitó a decir que el ataque fue perpetrado por "saboteadores y personas malvadas", sin atribuir la acción a ningún grupo en concreto, aunque pidió al Gobierno central de Bagdad que "encuentre a los ejecutores" para llevarlos ante la Justicia y "evitar que estos actos se repitan".
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Según Efe, Ramik Ramazan, el alcalde de Chamchamal, donde se encuentra el campo de Khor Mor, dijo anteriormente a los medios kurdos que otras tres personas resultaron heridas en el ataque. Reuters ha informado que el Departamento de Estado de EEUU ha condenado el ataque.
Los ministerios de Electricidad y Recursos Naturales del Kurdistán iraquí dijeron en un comunicado conjunto que el ataque tuvo como objetivo el depósito, lo que provocó "el cese del suministro de gas a las centrales eléctricas" y la consiguiente disminución de la producción eléctrica a unos 2.500 megavatios.
Agregaron que los equipos de emergencia de ambos departamentos están trabajando con las autoridades pertinentes para restablecer el funcionamiento de la instalación y reanudar el suministro de gas a las plantas eléctricas del Kurdistán.
Por su parte, una fuente de seguridad kurda dijo a Efe en condición de anonimato que se ha abierto una investigación para esclarecer quién es el responsable del ataque, del que ningún grupo ha reivindicado la autoría hasta el momento.
El yacimiento de gas de Khor Mor está operado por la empresa Dana Gas, establecida en Emiratos Árabes Unidos (EAU), y produce alrededor de 452 pies cúbicos de gas al día que sirven para alimentar las centrales eléctricas del Kurdistán iraquí.
Según Rudaw, en el pasado la instalación ha sido objetivo de ataques atribuidos a milicias iraquíes respaldadas por Irán.
La amalgama de milicias proiraníes Resistencia Islámica en Irak ha reivindicado más de 200 ataques contra instalaciones con presencia estadounidense en Irak y Siria, además de Israel, desde el inicio de la guerra en Gaza el pasado 7 de octubre.
Sin embargo, la agrupación ha limitado sus ataques desde principios de año debido a las conversaciones en curso entre Bagdad y Washington para establecer un calendario para la retirada de las tropas norteamericanas del territorio iraquí, una de las principales exigencias de las milicias para detener sus acciones.