Soldados de la unidad cibernéticas israelí, en acción.

Soldados de la unidad cibernéticas israelí, en acción. IDF

Oriente Próximo ISRAEL

Unidad 8200, el equipo de hackers independiente del Mossad tras la operación de los 'busca' explosivos

Sus actividades son confidenciales y están a cargo de las mentes más cualificadas en las Fuerzas de Defensa de Israel.

20 septiembre, 2024 03:01

Han transcurrido tres días desde el ataque a los buscas en Líbano que tuvo 12 muertos y cerca de 2.800 heridos, y dos del que acabó con al menos 20 muertos y unos 450 afectados. Las autoridades en Israel mantienen el silencio y no responden a las acusaciones de Hezbolá y del Gobierno de Irán de haber sido los responsables. Sin embargo, caben pocas dudas de que detrás de la maniobra está Israel, y muchos apuntan en una dirección cuando diseccionan su apartado cibernético: la Unidad 8200, una misteriosa entidad que habría participado en los preparativos de las operaciones. 

Una fuente de la Inteligencia señaló a Reuters que la sección militar se venía preparando desde hace cerca de un año. La planificación fue rigurosa y la operación tenía como objetivo limpiar la imagen de la Inteligencia del Estado, cuestionada tras la ofensiva de Hamás el pasado 7 de octubre. 

Si bien la Unidad no pertenece al Mosad, es reconocida como la más grande dentro del ejército y cada uno de sus miembros está altamente cualificado. Es, en palabras simples, equiparable a la NSA de Estados Unidos.

Una fuente de la seguridad occidental dijo a Reuters que la Unidad 8200 estuvo involucrada en la etapa de desarrollo de la operación contra Hezbolá, necesitó muchos meses de elaboración. Lo que sí se conoce es que desciende de los primeros grupos de descifrado de códigos surgidos tras la Segunda Guerra Mundial. 

La misma fuente sostiene que la Unidad 8200 se enfocó en los aspectos técnicos de la operación, buscando encontrar el modo de insertar explosivos en los dispositivos durante su proceso de fabricación. La actividad fue, como siempre, confidencial.

Tanto esta actividad como las que le anteceden están llenas de misterio. Sus funciones van desde la minería de datos hasta los ataques tecnológicos. Si bien poco se sabe de los episodios concretos en los que formó parte, su líder confirmó el año pasado haber usado inteligencia artificial para seleccionar objetivos de Hamás que atacar. Ahora, no sólo habría sido autor del pasado martes, sino también de los del miércoles, cuando cientos de walkie-takies estallaron de forma simultánea. 

También, según las Fuerzas de Defensa de Israel, la Unidad 8300 frustró un atentado del Estado Islámico contra un país occidental. Se cree, aunque no ha sido reconocido, que tuvo presencia en el ataque 'Stuxnet', que desactivó las centrifugadoras nucleares iraníes. Y ha formado parte de actividades de espionaje sobre palestinos tanto en Gaza como en Cisjordania. 

El director de investigación del Foro de Defensa y Seguridad de Israel, Yossi Kuperwasser, aseguró que los integrantes de 8200 son de los mejores y más brillantes miembros en todo el ejército del país. Su servicio, además, es central para las capacidades defensivas de Israel. No obstante, dijo no tener la certeza de que hayan sido autores del masivo ataque en Líbano.

Errores y enseñanzas

La unidad militar actúa de alerta preventiva en Israel. Es por eso, que tras los brutales ataques del grupo terrorista Hamás en octubre del año pasado, asumió la culpa de los hechos. El no haber detectado el ingreso del grupo armado les provocó una serie de críticas y cuestionamientos hacia su labor.

Las represalias continúan hasta ahora. La semana pasada, su comandante anunció a través de una carta, difundida por los medios israelíes, que dimite. En el documento, dijo no haber cumplido con su misión

Desde allí que la sección ha puesto el pie en el acelerador y ha establecido como gran objetivo limpiar su imagen y nunca más cometer un error de esa magnitud. Así lo observa Avi Shua, uno de los graduados en el bloque de inteligencia: "Ya sea un problema con la debilidad del software, matemáticas, cifrado, un problema para hackear algo... Debes ser capaz de hacerlo por tu cuenta". 

Los jóvenes reclutas suelen rotarse de forma permanente, reemplazando a aquellos funcionarios de más avanzada edad. Así lo aseguró Kobi Samboursky, también exmiembro de la Unidad y socio gerente de un fondo inversor en ciberseguridad e inteligencia artificial llamado Gillot Capital Partners. "Lo más importante aquí es la cultura del 'se puede hacer', donde todo es posible", añade. 

La reciente ofensiva en Líbano amenaza con abrirle a Israel un nuevo frente de guerra contra Hezbolá. Así, la misma agrupación del ejército que se asignó la culpa con el incidente que provocó el inicio del conflicto, ahora sería la autora de golpear al enemigo con una maniobra sin precedentes.