El Ejército israelí ha ordenado este sábado evacuar 22 localidades del sur de Líbano para combatir en el área contra la milicia chií Hezbolá y pidió a la población civil que se desplace al norte del río Awali. De manera paralela se informaba de un nuevo ataque contra la misión de paz de la ONU (FINUL) en su cuartel general en Naqoura, quedando un casco azul herido "por disparos". Esta cifra asciende a cinco los soldados heridos en tan sólo tres días.
Seguidamente han lanzado una amenaza a la población libanesa: "Está prohibido dirigirse al sur, cualquier movimiento hacia allí representará un peligro para tu vida", así lo ha comunicado el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee. Por su parte, FINUL ha dicho que el ataque se produjo en la noche del viernes y recordó "a todos los actores sus obligaciones de garantizar la seguridad del personal y las instalaciones de las Naciones Unidas, lo que incluye evitar las actividades de combate cerca de sus posiciones".
"La actividad de Hezbolá obliga a las Fuerzas de Defensa de Israel a tomar medidas. Las FDI no buscan hacerte daño. Por su seguridad, deben evacuar sus hogares inmediatamente. Cualquiera que esté cerca de miembros de Hezbolá, sus instalaciones o sus armas pone en peligro su vida", ha continuado el portavoz. Al menos 26 personas murieron y otras 144 resultaron heridas en la última jornada por los ataques israelíes.
Las localidades donde se ha ordenado la evacuación son Aita al Shaab, Ramiyah, Yater, Qozah, Beit Lev, Hanin, Rashaf, Ainta, Al Qalila, Al Hush, Nabaa, Toulin, Al Tamriyah, Al Khiyam, Al Khirbet, Kafr Hamam, Arab Al Louizeh, Abu Zablah, Jabal Al Adas, Dahr Beriyat Jaber, Kafra, Ramadiyeh y Zebqin.
El portavozha instado a la población libanesa a no regresar a sus hogares hasta que "las condiciones sea adecuadas" y advirtió de que cualquier movimiento al sur "supone un peligro para sus vidas".
En un mensaje anterior, Adraee hizo un llamamiento a los equipos médicos libaneses y ambulancias para que no transporten a combatientes de Hezbolá y acusó al grupo de usarlas para camuflarse y desplazarse escondidos.
"Pedimos a los equipos médicos para que eviten el contacto con los miembros de Hezbolá y no cooperen con ellos", indicó.
La ONU, en la diana
La misión de paz de las Naciones Unidas explicó que el casco azul herido, cuya nacionalidad no ha especificado, "fue sometido a una cirugía en nuestro hospital de Naqoura para extraerle la bala y actualmente se encuentra estable".
La nota señaló por otro lado que los edificios de la FINUL en la localidad meridional libanesa de Ramyah sufrieron también "daños importantes debido a explosiones de bombardeos cercanos".
En los últimos días, la FINUL denunció que cuatro de sus soldados resultaron heridos en incidentes similares, atribuidos a Israel, cuyo Ejército está enfrentado en la frontera con el grupo libanés chií Hizbulá desde hace un año.
Líbano: 2.100 muertos
Israel y el grupo chií Hezbolá están enzarzados en un intercambio de fuego desde hace más de un año, en paralelo a la guerra en Gaza, que ha escalado en las últimas semanas, cuando el Ejército israelí intensificó sus bombardeos en el país vecino y emprendió una incursión terrestre, que ha causado más de 2.100 muertos y 11.000 heridos en Líbano.
La aviación israelí lanzó la noche del jueves un bombardeo en el centro de Beirut, dirigido a Wafiq Safa, jefe de la unidad de enlace de Hezbolá que aparentemente salió ileso, pero en el que murieron otras 22 personas, después de que Israel matara hace dos semanas al jefe máximo del grupo chií, Hasán Nasralá.