"Reasentamiento ya": dos ministros de Netanyahu convocan a cientos de colonos para volver a ocupar Gaza

En el Otef ‘Aza -la ‘envoltura’ de Gaza, que comprende todos los kibbutzim masacrados por Hamás el 7 de octubre de 2023- se celebró el lunes ‘Preparemos el reasentamiento de Gaza’, el mayor acto de presión a las autoridades en el último año para permitir la entrada inmediata de colonos en la Franja por primera vez en 19 años.

Al mando de la iniciativa está Daniella Weiss, presidenta de Najalá, una organización de derecha radical que construye asentamientos en Cisjordania con la ambición de que Israel se la anexione. Ahora, la misión parece extensible al menor de los dos enclaves palestinos.

Ronen Zvulun Reuters

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"Venimos aquí con un propósito claro: colonizar toda la Franja de Gaza. No sólo una parte de ella, no sólo unos pocos asentamientos. Toda la Franja de Gaza, de norte a sur. Como resultado de la brutal masacre del 7 de octubre, los árabes de Gaza perdieron el derecho a estar aquí siempre, por lo que se irán a los diferentes países del mundo. No se quedarán aquí", aseveraba el lunes Weiss. "El mundo sigue en duda, pero les convenceremos de distintas maneras", auguraba.

La congregación sería otra más de la ultraderecha israelí -que en el último año ha lanzado planes urbanísticos para reasentarse en Gaza y el sur de Líbano- si no fuera por un hecho clave: esta fue organizada en un primer momento por el Likud, el partido del primer ministro Benjamín Netanyahu.

Aunque la formación se retiró posteriormente de la iniciativa tras recibir duras críticas, May Golan, su ministra de Igualdad Social y Promoción de la Mujer, acudió y pidió en una ponencia el reasentamiento israelí de Gaza. Según Haaretz, dijo: "Les golpearemos donde más les duele: en su tierra. Cualquiera que use su tierra para planear otro Holocausto recibirá otra Nakba de nuestra parte".

Un colono sostiene una bandera, el día de una conferencia sobre el reasentamiento de la Franja de Gaza, en Be'eri, sur de Israel. Reuters

Israel retiró a sus militares y colonos de Gaza en 2005 tras 38 años de ocupación. Ahora, tras más de un año de guerra en la Franja, Netanyahu aún no ha aclarado quién cree que gobernará Gaza después de la guerra. De hecho, sostiene que no tiene intención de volver a mantener una presencia permanente.

Pero en el gabinete de ministros de 'Bibi' hay voces que contradicen esta premisa. Al encuentro de esta semana también ha acudido Itamar ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional y férreo defensor de los asentamientos ilegales -él mismo vive en una colonia en Cisjordania-.

"Si queremos, podemos renovar los asentamientos en Gaza", prometió el lunes Ben Gvir a representantes de seis grupos que cuentan con más de 700 familias dispuestas a repoblar de judíos la Franja. "Es la mejor solución y la más moral, no por la fuerza sino diciéndoles: 'Os damos la opción, marchaos a otros países, la Tierra de Israel es nuestra", afirmó.

La mayoría de las potencias mundiales consideran que los asentamientos construidos en territorio del que Israel se apoderó en la guerra de 1967 son ilegales según el derecho internacional, y que su expansión es un obstáculo para la paz, ya que se comen la tierra sobre la que se basa el Estado palestino. Israel rebate esta opinión y aduce lazos bíblicos e históricos con la tierra, así como necesidades de seguridad.

El movimiento de colonos ha considerado que la retirada de Israel de Gaza en 2005 fue un error fatal que llevó a Hamás a apoderarse del territorio, lo que le permitió utilizar la Franja como base para disparar desde allí miles de cohetes contra Israel a lo largo de los años y montar el devastador ataque del 7 de octubre del año pasado.