Los tres principales hospitales que quedaban parcialmente operativos en el norte de la Franja de Gaza, el Kamal Adwan, el Indonesio y el Al Awda, han quedado fuera de servicio ante el asedio desde hace más de 80 días y los continuos ataques de las tropas israelíes.
"Las fuerzas de ocupación israelíes han dejado fuera de servicio los tres hospitales operativos en el norte de Gaza debido a los continuos ataques que han provocado la interrupción de su actividad y su destrucción", ha informado el director de hospitales de campaña del Ministerio, Marwan al Hams.
El doctor explicó que la situación, que ya era crítica especialmente en el hospital Kamal Adwan de Beit Lahia, se agravó ayer, cuando las tropas israelíes ordenaron la evacuación de los pacientes de ese centro al cercano hospital Indonesio, que más tarde fue asaltado por el Ejército, lo que obligó a evacuar por la fuerza a todos los enfermos y heridos.
"Los continuos ataques han suscitado preocupación por el destino del hospital Al Awda (en Yabalia), que alberga a unos 250 pacientes y también sufre un duro asedio y amenazas continuas", subrayó Al Hams.
El Ministerio de Sanidad de la Franja, gobernada por Hamás, denunció que es una "flagrante violación del derecho internacional humanitario", que prohíbe atacar las instalaciones médicas; y pidió actuar a la comunidad internacional para poner fin a estos "crímenes de guerra".
Estos tres hospitales han seguido funcionando a duras penas, y en medio de duros ataques, desde hace más de 80 días, después de que el Ejército israelí iniciara una cruenta reofensiva de "tierra quemada" en todo el norte del enclave, con un saldo desde entonces de más de 4.000 muertos y desaparecidos.
A pie y sin seguridad
En estos hospitales los enfermos, pacientes y sus acompañantes han tenido que abandonar los centros asediados a pie, sin garantías de seguridad.
"Hasta ahora seguimos siendo atacados", confirmó a EFE el director en funciones del Al Awda en Yabalia, Mohamed Salha, e indicó que un tanque israelí acecha aún el centro y que un francotirador apunta al edificio.
Por su parte, el director del Kamal Adwan, Hussam Abu Safiya, indicó que Israel ha vuelto a atacar directamente el hospital con dos robots explosivos detonados a escasos 50 metros del centro, lo que causó una veintena de heridos entre enfermos y personal sanitario.
Además, la aviación israelí ha vuelto a acometer ataques aéreos con drones cuadricópteros contra el hospital.
Unos 91 pacientes siguen en este hospital refugiados en una hilera de camillas en sus pasillos, mientras que las inmediaciones del edificio han sido uno de los principales objetivos de los ataques de Israel en las últimas semanas.
Israel comenzó una campaña de bombardeos contra las localidades norteñas de Beit Lahia, Yabalia y Beit Hanoun el pasado 5 de octubre, que al día siguiente se convirtió en una invasión terrestre y un cerco militar total.
En 80 días, este asedio del norte se ha cobrado la vida de unos 3.000 palestinos, mientras que unas mil personas permanecen desaparecidas; en medio de la incapacidad de la Defensa Civil para llevar a cabo labores de rescate desde hace un mes y medio ante el riesgo que implica adentrarse en la zona por los ataques directos de Israel a sus equipos.
La ONU estima que entre 10.000 y 15.000 personas siguen en la zona asediada, que antes de la guerra tenía más de 440.000 habitantes. Ahora, la mayoría de su población se ha visto sometida a desplazarse forzosamente, gran parte de ella a causa de este último asedio.
En más de catorce meses de guerra, los muertos en la Franja de Gaza por la ofensiva militar israelí ascienden a 45.338 y los heridos a 107.764, mientras se estima que hay 11.000 desaparecidos bajo los escombros, según Sanidad.