En España son numerosos los lugares en los que disfrutar de una buena gastronomía. De hecho, por toda la Península Ibérica podríamos hacer una ruta por las mejores tapas y disfrutar con platos como el cachopo asturiano, los pintxos vascos, el gazpacho, el salmorejo... Infinidad de opciones. En cualquier caso, si queremos hacer una escapada rural y comer bien, tenemos que acudir a Rute, el pueblo gastronómico por excelencia en Córdoba. ¿Quieres saber todo sobre este rincón andaluz? Aquí te lo contamos.
Una visita gastronómica por Rute
Cuando hablamos de Rute nos referimos a un pueblo y un municipio español de la provincia de Córdoba en Andalucía. Recordemos que Andalucía se ha consolidado durante este verano del 2020 como uno de los destinos favoritos por los españoles en esta "nueva normalidad", tras las Islas Baleares (primera opción) y las Islas Canarias (segunda). Por eso, no nos llama la atención que pueblos como Rute empiecen a estar en boca de todos, teniendo en cuenta además que ahora se prefiere el turismo rural sobre las grandes ciudades.
Aunque más que un pueblo podríamos decir que Rute es una villa, en tanto que según el padrón del INE del año 2017, en ese momento contaba con 10 042 habitantes. En lo que respecta a otros datos, su extensión superficial es de 132,1 km² y tiene una densidad de 75,85 hab/km². Como dato curioso sobre su geografía, Rute hace frontera con Málaga, Sevilla, Jaén y Granada.
Además, en primer lugar, de este lugar nos llama la atención su nombre. En lo que tiene que ver a esto, esta denominación provendría del vocablo Rut (nombre de Rute en época islámica), un antropónimo que significa "belleza" o "visión de belleza".
Como dato histórico, Rute el Viejo (del que aún se conservan sus ruinas) habría surgido en las primeras décadas del siglo XIII, como una fortaleza construida por los musulmanes en la Sierras Subbéticas con el objetivo de formar parte de la zona defensiva.
Lo que más importa de Rute es su relevancia a nivel gastronómico. En este lugar existen varias empresas y firmas del sector alimentario que han dotado al pueblo de mucho sabor. Por ejemplo, podríamos considerarlo "el pueblos de los dulces" y sobre todo, en una época en concreto, en Navidad. Cuando se van acercando estas fechas, llega el momento de la producción de dulces y de licores. Así que, si quieres comer los mejores dulces de invierno, no dudes en acercarte a este pueblo porque allí los encontrarás. En cualquier caso, Rute provee al resto de España con sus manjares.
Tenemos el caso de el Museo del Azúcar de la Flor de Rute: una empresa dedicada a la fabricación de dulces artesanales como los alfajores, mazapanes, hojaldres, mantecados, Cordobesas, turrones… De la empresa se hizo este museo para que todo el mundo pudiese disfrutar del proceso de elaboración de estos dulces. Durante los meses de octubre, noviembre y diciembre podrás disfrutar de la visita a este museo en el que encontrarás algunas de las recetas de estos dulces.
Otra de las empresas alimenticias de Rute centradas en la producción de dulces es Galleros Artesanos. En este caso, nos encontramos con una gran producción de turrones, bombones, hojaldres y Piononos. Además, estos son famosos porque todas las navidades crean un Belén de chocolate que no pasa desapercibido por ningún amante del azúcar. Como dato curioso, desde esta empresa se utiliza 1.500 kilos de chocolate para elaborar semejante Belén de chocolate, considerado el más grande de España puesto que tiene una superficie de más de 50 metros cuadrados.
Gallegos Artesanos también tienen un museo digno de ser visitado. En este caso, nos encontramos ante El Museo del Turrón, así como del Mantecado y el Mazapán. Este lugar se encuentra consagrado a difundir los procesos tradicionales en la elaboración artesana de dulces tan típicos de la Navidad como estos.
Dejando los dulces atrás, Rute no solo se dedica a la elaboración de aquellos manjares especiales de la Navidad, sino que hablar de este pueblo también es hablar de anís. Podríamos decir que Rute sabe a turrón y huele a anís... Desde 1860 se viene haciendo aquí esta bebida destilada, concretamente es famoso el Anís Machaquito. En las instalaciones de la fábrica se puede hacer un recorrido por el destilado y el embotellado, y como no, es posible realizar una cata.
No solo se encuentra allí el Machaquito de Rute, sino también las Destilerías Duende, en este caso, una casa fundada en 1908. Allí podemos encontrar: un Patio con Duende de gran importancia digno de ser visitado y un museo para recorrer la historia de la producción del anís.
Finalmente, para aquellos que no son ni de dulce ni de alcohol, Rute también es sinónimo de buenos jamones y buen aceite. Si queremos comer buenos embutidos, en Rute los tenemos con el Museo de la Chacina. Se trata de un lugar en el que encontramos el salchichón más largo del mundo, el chorizo más grande del mundo y el flamenquín más largo del mundo (con cuatro metros y medio de longitud, 140 kilos de peso y lonchas de cuatro jamones en su relleno).
Y como no... Rute tiene un Museo del Jamón que va a cargo de Jamones Rute. Se trata de una empresa fundada hace más de 60 años por la familia Jiménez Bueno. Allí podemos disfrutar de los mejores jamones y hacer una cata de ellos. De tal forma que podríamos hablar de Rute como el lugar de las catas y de los museos gastronómicos.