España tiene muchas cosas buenas, valoradas tanto por los españoles como por quienes vienen a estudiar, vivir o trabajar al país. La primera de todas es la gastronomía, una dieta mediterránea variada que permite disfrutar hasta a los paladares más exigentes, pero también una cultura de festividades y fiestas y, especialmente, un clima prácticamente perfecto.
La posición de España en la zona templada del hemisferio norte contribuye a que el clima sea generalmente suave y agradable. Con inviernos que nos permiten caminar por la calle llevando únicamente una chaqueta puesta y veranos calurosos perfectos para relajarnos en la playa, las temperaturas son uno de los principales motivos del interés internacional por el país.
Por este motivo, cuando salimos fuera es habitual que nos choquen las temperaturas de otros lugares del mundo, como por ejemplo Suiza, donde los inviernos son muy fríos y está parcialmente nublado todo el año. En estos casos, un pequeño rayo de sol puede hacernos apreciar el clima español, como le ha pasado a Sara (@sarainzurich).
La diferencia de climas en ciudades de Europa
Está demostrado científicamente que la luz solar estimula la liberación de endorfinas y serotonina, conocidas como las hormonas de la felicidad. De hecho, existen personas con trastornos afectivos estacionales que son un tipo de depresión que produce cambios de ánimo graves durante el invierno, cuando hay menos luz.
"Odio el invierno, odio el frío, odio que esté nublado y no ver el sol durante tres semanas", explica la tiktoker y añade: "Pero luego hay momentos como este: hoy lleva todo el santo día nublado, son las 6 de la tarde y no he visto el sol. De repente ha salido el sol, y además, se ha puesto a llover, ha salido a la par".
Sara, que vive en Zürich y cuenta desde su perfil de TikTok todas sus vivencias, ha explicado que ese sol, que ha salido únicamente durante un rato, se siente diferente a cuando lo ves todos los días. De alguna manera, la española confiesa que aprendes a valorar esos momentos.
"No sabes cuándo vas a volver el sol, por eso, cuando sale te ilusionas mucho", dice mientras explica que siempre que se ve un rayo de sol se queda mirándolo, porque no sabe cuándo va a volver a suceder y por ello lo aprecia mucho más que si lo tuviese todos los días.