Así se aterriza un bombardero sin tren de aterrizaje delantero
¿Qué puede ser peor que intentar aterrizar un avión con vientos de 65 km/h? Es muy posible que sea intentar aterrizar un bombardeo sin tren de aterrizaje delantero. Tal situación se dio el 4 de Octubre de 1989, cuando en un entrenamiento la tripulación se dio cuenta de que el tren de aterrizaje delantero no bajaba por un problema hidráulico.
El aterrizaje perfecto en el lugar perfecto
Inmediatamente empezaron a sucederse los planes para aterrizar el preciado avión, un B-1B “Lancer”; este modelo es un bombardero capaz de alcanzar velocidades supersónicas y muy popular entre la fuerza aérea estadounidense, y de hecho sigue en servicio y seguirá hasta el 2020. Pero este en particular desarrolló un problema hidráulico en su tren delantero, lo que no dejaba muchas opciones: había que aterrizarlo con el morro.
Para ello, control desvió el avión hasta una salina donde la blanda superficie ayudaría a frenar el avión sin provocar daños excesivos. No fue un aterrizaje sencillo, y como prueba de ello la tripulación recibió el premio anual Mackay al “vuelo mas meritorio del año”.
Fuente | The aviationist