Así será la primera campaña de marketing que llegará a la Luna
El marketing y las campañas publicitarias en general siempre me han parecido algo muy complicado. Es una mezcla entre psicología, persuasión y conocimiento de las necesidades de la gente (o de las necesidades que queramos crear), y a la vez consiguiendo que se fijen en lo que queremos vender, digno de admirar vaya. De hecho hablamos largo y tendido sobre como juega el marketing con nuestras emociones para conseguir su objetivo, y hay formas para todos los justos. Sin embargo, lo esencial lo sabemos todos: Destacar. Si no destacas, no vendes, ¿verdad? Eso al menos debe haber pensado la empresa fabricante de bebidas Otsuka, pues se les acaba de ocurrir una idea totalmente fuera de este planeta: Llevar su bebida a la Luna.
La primera campaña publicitaria que llegará a la Luna
La empresa Otsuka, procedente de Japón, está especializada en la fabricación de bebidas deportivas en polvo. Y en el caso de la campaña de la que hablamos hoy su objetivo es hacer llegar una lata de titanio de 1 kilogramo llena de su producto. Se convertirá así en el primer producto comercial que llegará a la Luna.
Para conseguir esto, el bote en cuestión viajará a nuestro satélite natural el próximo mes de octubre de 2015 gracias a la primera misión lunar privada que se realizará mediante el cohete Falcon 9, un tipo de transporte espacial reutilizable fabricado por SpaceX, que por el momento ya ha conseguido realizar tres viajes de ida y vuelta hacia la Estación Espacial Internacional para hacer llegar suministros. Sin embargo, poder llegar a la Luna sería el primer éxito con esa distancia conseguido por el Falcon 9. Nada más y nada menos que 380.000 kilómetros de viaje.
Tras conseguir llegar a la superficie Lunar, el bote será depositado gracias a la empresa Astrobotic, pues pretende ser la primera compañía privada en conseguir llevar un dispositivo a la Luna, moverlo durante 500 metros por su superficie, y transmitir imágenes de alta definición hacia la Tierra. Todo esto podría otorgarle el premio Google Lunar X Prize valorado en 20 millones de dólares.
Eso si, a Otsuka no le costará nada barato el envio de su bebida, pues Astrobotic les cobrará medio millón de dólares por la entrega. Y, lo más irónico de todo, es que la empresa privada que pretende llegar a la Luna enviará una lata y su objetivo actual es luchar por la limpieza de basura espacial. Bastante paradójico todo, pero el dinero manda, ¿no?
Vía | Lunar Dream.