Llega el coche con el que diremos adiós a las multas de velocidad, aunque para mucha gente sea perder la libertad que nos ofrece la conducción: es el coche que obliga a cumplir el límite de velocidad.

El nuevo Ford S-Max, con un lanzamiento previsto para mediados de año, es el primer coche de la compañía con la tecnología propietaria Intelligent Speed Limiter; su nombre lo dice todo, es un limitador de velocidad inteligente.

Los sistemas del coche son capaces de averiguar la velocidad máxima permitida gracias a una cámara en el parabrisas que monitoriza las señales presentes en la vía. Cuando detecta una de velocidad, manda la orden al ordenador de a bordo para rebajar la velocidad automáticamente; esto no se hace activando el freno, sino rebajando la cantidad de combustible que llega al motor.

Hay que dejar claro que no estamos ante un método ideado únicamente para escaparse de los radares como el coche de Hyundai anunciado el año pasado, sino que en este caso nuestra seguridad y la del resto de conductores está ante todo; este sistema se activa siempre que hay una señal de límite de velocidad, no porque haya un radar, aunque evidentemente también evitaremos multas.

El coche que obliga a cumplir el límite de velocidad es más seguro

ford 2

Según encargados de Ford, los conductores no siempre somos conscientes de la velocidad a la que vamos y sólo nos damos cuenta cuando nos pillan; este sistema inteligente es una ayuda que nos quita esa preocupación de la cabeza. Al mismo tiempo, podría decirse que nos deja más cerca de los coches autónomos.

Tiene sentido que el primer modelo de Ford en recibirlo sea el S-Max, un vehículo claramente orientado a llevar a la familia y por lo tanto sus conductores estarán más dispuestos a perder la libertad de apretar el acelerador a cambio de proteger a los ocupantes, aunque es posible desactivarlo completamente con un botón en el volante o temporalmente presionando fuertemente el pedal del acelerador.

Eso si, sería de extrañar que llegase a sus modelos más deportivos, con un público claramente diferente. ¿Estaríais dispuestos a que vuestro coche no pasase nunca de la velocidad máxima?