Disney y Netflix reavivan el miedo a la burbuja del streaming, y la piratería puede ser la vencedora cuando explote
La burbuja de los servicios de streaming provocada por el aumento en la cantidad de servicios puede dar alas a la piratería.
9 agosto, 2017 21:21Noticias relacionadas
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La burbuja de los servicios de streaming es muy real, como está demostrando Disney.
Cuando Disney anunció que no iba a continuar la colaboración que tenía con Netflix, y que iba a crear su propio servicio de streaming, la reacción en Internet fue abrumadora: nadie pidió eso.
Es comprensible, es una decisión que va en contra de los intereses de los consumidores, y que puede tener duras consecuencias para el futuro de la industria. Durante los últimos años la televisión ha perdido, poco a poco pero de manera constante, el interés de la audiencia; los tiempos han cambiado, y con ellos la audiencia.
Disney y Netflix rompen y se pueden llevar por delante el sector del streaming
Ya no aceptamos tener que tragarnos 20 minutos de publicidad por 30 minutos de contenido. Odiamos que los horarios sean impuestos por una compañía, y no podamos ver el contenido cuando queramos.
Queremos ver las series del tirón (binge watching), en vez de esperar cada semana a que se emita un nuevo capítulo. Y no podemos olvidar que nuestra vida ya no gira alrededor del televisor, sino de nuestros dispositivos móviles.
Los servicios en streaming son la respuesta a esta demanda del mercado; y ninguno ha conseguido tanto como Netflix, que ha convencido a propietarias de derechos de todo el mundo para emitir su contenido por Internet. El efecto secundario es que estas compañías se han pensado que pueden hacer lo mismo por su cuenta.
Como si crear una plataforma de streaming fuese tan sencillo; y como si los usuarios estuviesen dispuestos a pagar treinta cuotas diferentes sólo para ver sus series favoritas.
Es muy bueno que haya competencia en el sector del streaming; pero esta competencia debe nacer entre varios servicios que ofrezcan un catálogo completo además de las exclusividades. Para que, si un usuario sólo quiere usar un servicio, pueda hacerlo.
La excesiva fragmentación del mercado sólo supondrá malas noticias en el futuro; pero estamos en el presente, y ahora mismo parece que el mercado puede aguantar eso y más.
Disney quiere ofrecer un servicio de streaming independiente para cada una de sus licencias
Sólo así se entienden locuras como la de Disney. No es solo que quiera crear su propia plataforma de streaming, algo perfectamente comprensible; es que también quiere crear plataformas exclusivas para sus propiedades.
Según el CEO de Disney, Bob Iger, una posibilidad sería que cada propiedad de Disney tuviese su propio servicio de streaming independiente. Es decir, que todo lo relacionado con Star Wars tuviese su propio servicio, que todo lo de Marvel tenga otro, etc.
Y por supuesto, cada uno con una cuota; claro, que probablemente podríamos optar por un servicio premium que acogiese todo el contenido en un solo lugar. Pero la idea de fragmentar la oferta de esa manera demuestra que los ejecutivos se han cegado con el éxito del streaming.
Por el momento es sólo eso, una idea, y Bob Iger asegura que quieren ser cuidadosos con el volumen de contenido que tendría cada uno de esos servicios. Al mismo tiempo, sienten que juntar Star Wars, Marvel y Disney bajo un mismo paraguas no sería lo adecuado.
La burbuja del streaming puede resucitar la piratería
El mayor miedo en estos momentos, tanto para la afición como para la propia industria, es que esto sea el síntoma de una burbuja.
Que el mercado en realidad no pueda acoger tantos servicios al mismo tiempo, y tarde o temprano explote; y cuando lo haga, el sector del entretenimiento saldría muy mal parado.
La posibilidad de que los usuarios vuelvan a confiar en unos servicios tan abusivos es baja. Y ante estos abusos, es inevitable que una buena porción de los usuarios decida dar el salto a la piratería.
Es habitual encontrar testimonios en redes sociales de gente que antes pirateaba mucho, pero que ahora prefiere pagar una pequeña cuota para disfrutar del contenido de manera oficial y al momento.
La burbuja provocaría el efecto contrario, que más gente opte simplemente por piratear en vez de pagar varias cuotas y entrar en un servicio diferente cada vez que quiera ver algo.
Nadie quiere ese futuro. Pero si el mercado sigue en esta dirección, puede que acabe repitiéndose la historia.