El Netflix de las salas de cine permite ver una película cada día por 10 $ al mes, ¿el futuro?
Moviepass es el llamado "Netflix de las salas de cine". Un servicio para ver películas en el cine con suscripción, una cada día.
16 agosto, 2017 10:15Noticias relacionadas
MoviePass, el servicio para ver películas en el cine con suscripción mensual, acaba de mejorar su servicio. ¿Es esto lo que nos depara el futuro de la industria?
Que la industria del cine está en crisis es una obviedad. Primero fue herida de muerte por la piratería, cuando la gente se dio cuenta de que prefería ver las películas en casa; y fue rematada por la industria del streaming, que aunque ofrece el mismo contenido más tarde, es más conveniente.
Moviepass fue creada por el cofundador de Netflix, Mitch Lowe, en un intento de adaptar lo que ha hecho exitosa a la industria del streaming; no hemos hablado mucho de esta startup porque su oferta inicial (dos peliculas por 15 dólares) no era nada atractiva y porque sólo estaba en EEUU.
Cómo funciona el “Netflix de las salas de cine”
Hoy Moviepass ha dado un paso de gigante para convertirse en el Netflix de las salas de cine. Su nuevo servicio de suscripción cuesta sólo 9.95 dólares al mes sin contrato; y por esa cantidad podemos ver una película cada día en una sala de cine.
Hay ciertas limitaciones, como que no podemos usar salas con tecnologías especiales como IMAX o las 3D; además, no todas las salas de cine se han apuntado, aunque si muchas: más de 4000 salas del país participan en el programa. Por supuesto, hablo de EEUU, ya que este servicio aún no ha dado el salto a otros países.
Teniendo en cuenta lo que cuesta sólo una entrada, Moviepass merece la pena aunque no vayas mucho al cine; tal vez por eso la página oficial ha sido asediada por visitantes que quieren apuntarse al periodo de prueba gratuito.
Ver películas en el cine con suscripción, ¿la última esperanza de la industria?
¿Es esto lo que necesita la industria del cine para sobrevivir? Está claro que la audiencia aún tiene ganas de cine, y que los servicios de streaming no son capaces de sustituir a las salas, aún no del todo.
Por supuesto, si quieres ver la última película de moda la única manera de hacerlo es en el cine; eso puede cambiar en el futuro, como demuestran las películas producidas por Netflix o Amazon. Pero mientras las grandes productoras sigan dando prioridad a las salas, su existencia no está comprometida.
Un servicio como Moviepass puede servir para volver a atraer clientes; sí, el beneficio por cliente es inferior, pero ya sabemos que esos no son los únicos ingresos de una sala. Lo importante es instaurar de nuevo la costumbre de ir al cine, a lo mejor no cada día, pero sí cada fin de semana.
Si las salas de cine no consiguen eso, las grandes productoras seguirán mirando al streaming. Puede que lo que necesiten sea la ayuda de su peor enemigo.