Es imposible predecir el futuro (pueden ocurrir muchas cosas), pero en la astronomía se puede hacer estimaciones de lo que va a ocurrir en los años venideros. Y el recorrido del Tesla Roadster enviado al espacio el 6 de febrero, uno de los eventos científicos más hablados de este momento, se puede predecir si pasará o no cerca de nuestro planeta Tierra y cuál es el riesgo de colisión con este, si lo hubiera.
El Tesla Roadster es el descapotable que envió SpaceX al espacio con fines científicos (para probar un cohete, básicamente), desatando una hora de personas en contra de enviar ‘basura’ al espacio (pues, al fin y al cabo, es un bloque de basura). Se ha hablado de que podría interferir con otras misiones, o incluso impactar con nuestro planeta o con otros, ¿sería posible?
Alguien lo ha calculado y resulta que sí pasará relativamente cerca de la Tierra; y además, hay posibilidades de que colisione con nuestro planeta.
Ahora mismo, según la página web que nos indica en qué punto se encuentra el Roadster en cada momento, está a casi 4 millones de kilómetros de nuestro planeta (o unos 0,025 unidades astronómicas) a una velocidad de poco más de 3 kilómetros por segundo. Debido a que se encuentra en una órbita cruzada de Marte, en principio no saldrá de nuestro sistema, por lo que periódicamente volverá a la Tierra.
Pocas probabilidades de impacto, y la primera en 2091
El (breve) estudio ha sido realizado por dos investigadores en astrofísica de la Universidad de Toronto, Ontario (Canadá) y uno de la Universidad Carolina de Praga (República Checa), quienes han calculado, mediante la realización de simulaciones de órbitas que podría tomar el cuerpo, la posibilidad de que el Tesla Roadster, al pasar por al lado de nuestro planeta, impacte con él.
Esta posibilidad, en concreto, es del 6% de que el Tesla Roadster se estrelle con la Tierra en el próximo millón de años. Y la primera vez que se aproximará a la Tierra (y por lo tanto cuando tendrá la primera oportunidad para estrellarse) será en 2091. Debemos estar tranquilos, por lo tanto, pues las probabilidades no son altas.
Pero la Tierra puede no ser el único planeta del Sistema Solar con el que pueda impactar, sino que la otra posibilidad (mucho menos probable) es Venus, con un 2,5% de convertirse en parte de este planeta en el mismo periodo de tiempo, es decir, en el próximo millón de años.