Los nuevos radares indetectables de la Guardia Civil no funcionarían con lluvia ni calor, y las multas no llegan

Las multas de los nuevos Velolaser de la Guardia Civil no están llegando a los conductores; todo indica que su estreno ha sido un fracaso.

Después de años de desarrollo y retrasos, los nuevos radares Velolaser fueron estrenados con gran fanfarria en la pasada Semana Santa; el objetivo de la DGT era colocarlos en las zonas más peligrosas durante uno de los periodos de más movimiento en las carreteras españolas.

Mucho se habló de la innovadora tecnología integrada en los Velolaser. Por ejemplo, de cómo se pueden instalar en cualquier parte, gracias a su reducido tamaño. O de cómo pueden detectar la velocidad de los vehículos sin ser a su vez detectados por mecanismos o sistemas ilegales.

Sin embargo, desde su supuesto lanzamiento, los Velolaser sólo han dado problemas a la DGT. Para empezar, ese “supuesto lanzamiento” no fue tal; la DGT sólo hizo algo de teatro para influir en los conductores. En realidad no ha sido hasta la cercanía del verano que los primeros radares empezaron a llegar a las carreteras.

Finalmente llegó el verano en España, otra época de mucho movimiento en las carreteras. Y ahora por fin, los Velolaser están instalados y capturando a infractores, ¿verdad?

Las multas de los nuevos Velolaser no estarían llegando

Pues parece que no. Según informa en exclusiva AutoBild, los Velolaser están plagados de problemas, llegando al punto de que las multas no están llegando a los supuestos infractores. Esto se infiere gracias a los datos de Pyramid Consulting y SocialDrive, una app para iOS y Android para conductores.

velolaser radar 1

De las 85.000 multas de tráfico registradas en los últimos tres meses, ni una sola ha sido registrada con un Velolaser; sería muy raro que ninguno de estos radares haya “pillado” a un sólo conductor en tanto tiempo. No está claro el motivo por el que las multas no llegan; fuentes indican que los radares funcionan y que capturan a los que se saltan el límite.

Eso cuando funcionan, claro. Las mismas fuentes apuntan que estos dispositivos son muy sensibles ante los cambios meteorológicos; y que en situaciones de lluvia o incluso hace un poco de calor, dejan de funcionar. A partir de los 30ºC la electrónica estaría sufriendo fallos, algo difícil de imaginar en un dispositivo diseñado para permanecer todo el día al aire libre.

Por su parte, la DGT ha respondido a estos rumores, afirmando que los Velolaser “están multando con normalidad”. Sin embargo, las contradicciones del supuesto lanzamiento en Semana Santa no ayudan a que los conductores se lo crean.