El coche eléctrico más rápido del mundo ha batido a los mejores deportivos

El NIO EP9, el coche eléctrico más rápido del mundo, ha conseguido otro logro: el récord de coches de calle en Goodwood.

Este fin de semana se ha celebrado el Goodwood Festival of Speed; una reunión de los vehículos más extraños, míticos y rápidos del mundo.

La subida de 1,86 kilómetros a la colina de Goodwood no es comparable a circuitos completos, pero también tiene sus partes complicadas; y el protagonista de este año no ha sido sólo el Roborace, el primer coche de carreras autónomo.

Con los años Goodwood se ha convertido en un gran escaparate para las marcas; que incluso llegan a presentar nuevos modelos durante el evento. Pero el NIO EP9 no es precisamente nuevo; ya hablamos anteriormente de él en Omicrono cuando se enfrentó al infierno verde, el Nürburgring. El proyecto de origen chino sigue adelante, y este fin de semana ha sorprendido a propios y a extraños.

El coche eléctrico más rápido del mundo domina Goodwood

El crono de 44,61 segundos ha batido el récord para vehículos de calle; es decir, que el NIO EP9 no es sólo el coche eléctrico más rápido del mundo (algo que ya sabíamos gracias al récord del Nürburgring) sino que en este recorrido corto es capaz de vencer a los numerosos supercoches que han participado.

nio ep9 coche electrico 2

Hay que aclarar que esa marca se ha conseguido con neumáticos lisos; entre eso, y que es un coche de producción limitada (sólo se esperan fabricar 16 unidades), no ha roto el récord de coche de producción. Pero sí que se considera un “coche matriculable”, como otros supercoches que tienen su propia clasificación.

El crono llama la atención porque es 3 segundos más rápido que el anterior poseedor, un McLaren P1 LM modificado. No solo eso, sino que a su vez es apenas 3 segundos más lento que el Formula 1 que posee el récord absoluto del recorrido; Nick Heidfield lo consiguió con un McLaren de F1 en 41,60 segundos.

El NIO EP9 lleva varios años en desarrollo, pero este tipo de logros indican que puede estar más cerca de la producción. Con sus cuatro motores eléctricos que consiguen una potencia de 1.360 caballos, es capaz de acelerar de 0 a 200 km/h en sólo 7.1 segundos; sí, has leído bien, 200 km/h. La velocidad máxima es de 313 km/h, y la autonomía es de 427 kilómetros.

El coche eléctrico más rápido del mundo no será para todo el mundo, eso desde luego. Pero es una buena muestra de que el concepto del “supercoche” no desaparecerá con la tecnología eléctrica; en todo caso, sólo mejorará.

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