Así es el puente sobre el mar más largo del mundo
China ha inaugurado el puente sobre el mar más largo del mundo. Se encuentra en Pekín y os desvelamos algunos de sus datos más interesantes.
23 octubre, 2018 13:09Hoy se ha constituido un hito en el mundo de la ingeniería: el puente Hong Kong-Zhuhai-Macao, el más largo sobre el mar jamás construido, ya se ha inaugurado. Ha sido hoy mismo en Pekín, China, por el presidente Xi Jinping. Una obra de 55 kilómetros de largo y que ha costado una friolera de 20 000 millones de dólares y 9 años de duro trabajo. Os contamos todos los entresijos de esta obra de la ingeniería moderna.
El puente Hong Kong-Zhuhai-Macao es el más largo del mundo construido sobre el mar
Este puente ha supuesto todo un reto a nivel de ingeniería y construcción. Hablamos de un puente que comprende una distancia de 55 kilómetros sobre el mar. Es el más largo del mundo y algunas de sus cifras nos dejan entrever la magnitud del proyecto.
Para empezar, la cantidad de acero usada en este proyecto ha sido de 400 000 toneladas, unas 60 veces la cantidad que se usó para levantar la Torre Eiffel. Además, bajo esta construcción se han construido túneles submarinos para albergar parte de la infraestructura del puente, y además, se ha creado una isla artificial para sostener a este portento.
Este puente une las regiones de Hong-Kong, Zhuhai y Macao, pero además cerca se unen otras regiones como Shenzhen, el conocido Silicon Valley chino y Cantón, en una región que aporta el 9,1% del PIB nacional, gestiona el 26% de sus exportaciones y alberga una población de más de 60 millones de habitantes, parecida a la de países enteros como Reino Unido.
De extremo a extremo, el puente supone veinte veces el puente Golden Gate de San Francisco, icónica construcción que queda lejos de esta maravilla arquitectónica. Imaginad el puente de San Francisco, de extremo a extremo, multiplicado 20 veces. Además, la estructura general está diseñada de tal manera que aguante terremotos y tifones, además de choques de barcos. Se estima que su duración será de aproximadamente 120 años.
El puente se sumerge debajo del agua por un tramo de 6,7 kilómetros, a través de dos islas artificiales creadas para este proyecto. El proyecto también cruza la trayectoria de vuelo de las aeronaves que salen del aeropuerto internacional de Hong Kong, por lo que los ingenieros se tuvieron que someter a una limitación de altitud exacta. Además, bajo el puente, hay una red de túneles submarinos creados para asentar todavía más la estructura en el lecho oceánico.
Pero la mayor ventaja para los oriundos del lugar es la reducción de tiempo. El delta, de forma terrestre, se cruza en aproximadamente 4 horas. Este puente acorta ese tiempo a 30 minutos.
Estas islas funcionan a modo de “estaciones”. Son una entrada a un túnel submarino que conecta con la otra orilla del delta en el que está situado el puente. Los coches deberán cruzar esta infraestructura para usar el puente que conecta las dos regiones.
Sus cifras también son importantes a nivel económico. El presupuesto ha rondado los 20 000 millones de dólares, pero los funcionarios de Pekín aseguran que el beneficio de este proyecto y el que percibirá la economía china será de unos 1.44 billones de dólares. En definitiva, un proyecto titánico que reafirma las bases de estos proyectos: demostrar el poder de la ingeniería y la construcción del ser humano.