Estos últimos días ha habido ciertas polémicas en YouTube. En especial, con su sistema de advertencias o strikes. Los creadores de contenido se están quejando de que el sistema no funciona bien y que empresas están usando este sistema o bien para reclamar la eliminación de un vídeo que obtendrá millones de visitas o para simplemente intentar tirar un vídeo o contenido en especial. Además no faltan algunos usuarios que también están usándolo de forma fraudulenta.

De hecho, esto se ha hecho todavía más evidente con el caso de The Verge y los youtubers de tecnología. Ahora y tras toda la polémica YouTube ha anunciado cambios en este sistema. Y mucho nos tememos que no van a tener apenas impacto en el problema.

Los strikes de YouTube se actualizan, y no parece que vaya a cambiar nada

Concretamente lo que ha recibido más cambios han sido los strikes o advertencias. Este sistema determina las advertencias que un canal puede recibir hasta o bien borrar su contenido o bien ser completamente eliminado. Este sistema, al igual que el de las reclamaciones por copyright, presenta polémica por sus numerosos fallos y falsos positivos por culpa del famoso algoritmo.

Estos cambios se aplicarán el día 25 de febrero y no cambian demasiado la fórmula original. A grandes rasgos, el sistema de strikes hasta ahora se manejaba de esta forma:

• Primer strike: el canal tiene prohibido hacer directos y es obligado a borrar determinados vídeos que infrinjan las reglas o que provoquen el strike.
• Segundo strike: el canal es obligado a borrar determinados vídeos que infrinjan las reglas de la Comunidad.
• Tercer strike: si el canal recibe el tercer strike en un periodo de 90 días y sigue infringiendo las normas, será completamente eliminado.

Los cambios que YouTube plantea no solucionan su mayor problema. En primera instancia, se mostrará una advertencia sin penalización pero pidiéndole que borre el contenido que está generando dicha advertencia.  Según la misma YouTube, “esto es para asegurarse de que todos se tomen el tiempo de aprender sobre nuestras normas de la comunidad”.

El sistema de 3 strikes se activa una vez la advertencia se ha realizado. Si el canal no infringe las normas en 90 días, los strikes se restablecerán. Eso sí, lo que no se reiniciará es la advertencia de primera instancia. Ahora, las sanciones también han cambiado, quedándose así:

• El primer strike congelará un canal durante una semana. Los usuarios no podrán cargar ni transmitir ningún contenido nuevo a YouTube. Como antes, este expirará después de 90 días.
• Si se recibe un segundo strike dentro de ese periodo de 90 días resultará en una congelación de la misma índole de dos semanas.
• Por último, el tercer strike en ese período de 90 días hará que YouTube cierre el canal

YouTube está tratando todas las violaciones de dichas normas de la comunidad de la misma manera, lo que significa que una persona que recibe un strike por, digamos, la infracción de derechos de autor obtendría la misma sanción que una persona que publica amenazas o discursos de odio violentos.

Los falsos positivos y los reclamantes sin escrúpulos

Hace ya un tiempo, el medio The Verge subió un vídeo a su canal de YouTube que hablaba de montar un PC tanto para jugar como para trabajar por unos 2000 dólares. Aunque aún se puede encontrar el vídeo resubido, el “How to build” fue tan desastroso que la comunidad tecnológica estalló en contra. Unas malas praxis en un tutorial que podían provocar que dicho montaje hiciera al ordenador inservible.

Ahora, el partner detrás de The Verge está intentando cerrar el canal de los principales youtubers que hicieron una crítica al respecto. Ya no hablamos de que se reclame el vídeo por copyright (que también lo están haciendo), sino que además están intentando que algunos canales de esta clase reciban este tipo de strikes. El caso que ha iniciado la polémica ha sido el del canal de Bitwit, con casi 2 millones de suscriptores que hizo una videoreacción que no tiene desperdicio.

Después de esto, varios canales de la comunidad tecnológica angloparlante de YouTube como JayzTwoCents, Paul’s Hardware y demás se alzó ya no sólo para denunciar el caso de abuso por parte de The Verge, sino las malas praxis que llevan a cabo empresas y usuarios en este sistema de advertencias y reclamaciones.

Estos cambios no cambian el problema. Muchísimos grandes de la plataforma e incluso en habla hispana como Rubius están teniendo severos problemas de este tipo. Por ejemplo, hace poco el youtuber se quejaba de que por apenas unos segundos de música en su vídeo la discográfica, sin mediar palabra por parte de YouTube, iba a quedarse con todos los beneficios de ese vídeo. Un vídeo que ya acumula varios millones de visitas en un canal de más de 30 millones.

A todo este problema se le suma que estos grandes competidores se están pasando a la plataforma rival, Twitch. Si YouTube no modifica el sistema para que pueda ser al menos justo para las dos partes, muchos abandonarán la plataforma (como ya han estado amenazando unos cuántos como PewDiePie) en favor de Twitch. Y ahí YouTube tendrá un problema más gordo que el Artículo 13.