Cuando hay empresas con tantos adeptos como lo son Tesla y Apple, la gente empieza a pensar en un futuro en el que esas empresas se compran una a la otra. Google compra a HTC, Samsung compra Apple, etcétera. Pero, ¿y si Apple compra Tesla y todo lo que conlleva?

Puede sonar una locura, pero esto ya se intentó hace tiempo. Apple ya intentó hacerse con Tesla a golpe de talonario, y aunque pueda parecer extraño que una empresa como los de Cupertino quiera una firma de coches eléctricos, tiene mucho más sentido del que crees.

Sí, Apple intentó comprar Tesla y podría volver a intentarlo

Para empezar, algo de historia. Tenemos que remontarnos hace 6 años, en el 2013. Según Craig Irwin, analista de inversión para Roth Capital Partners, Apple intentó hacerse con Tesla. En palabras del mismo Irwin en un programa de la CNBC y recogidas por Motorpasion:

“En 2013 hubo una oferta muy seria de Apple alrededor de 240 dólares la acción, es algo que hemos contrastado con diversas fuentes y confiamos en que es verdad. Apple pujó por Tesla. No sé si llegaron hasta el punto de formalizar algo sobre papel, pero sé de diferentes fuentes seguras que es cierto”. 

Esto podría quedar como una anécdota empresarial más, como aquella que nos hablaba del primer prototipo de Android antes de que se presentara el mítico primer iPhone. Y todo esto se podría haber quedado en un “¿Y si Apple compra Tesla y vemos el primer coche de Cupertino?”. Pero Irwin no se queda ahí, y según sus declaraciones podríamos pensar en un nuevo intento de compra.

Debemos recoger otra vez las palabras de Irwin, ya que tiene varias bases desde las que partir. Para empezar, lógica: si Apple se interesó por Tesla en un pasado, por muchos años que hayan pasado pueden seguir interesados en ella. Dada la situación de Tesla (a la que pronto llegaremos), este punto puede ser más que fiel a la realidad.

Por otra parte, Irwin piensa que el carácter “cash neutral” de Apple podría incentivar esa compra. Apple tiene una gran cantidad de ingresos, y el dinero guardado no tiene sentido si no se usa. La moneda cambia y puede devaluarse, lo que provocaría que diversas inversiones dejaran de tener sentido.

Además, Irwin asegura que se están construyendo naves secas en California. Las naves de esta índole se caracterizan por tener unos niveles de humedad muy bajos, ideales para fabricar baterías de iones de litio para coches eléctricos. Tal y como vimos hace no mucho, según ciertos reportes Apple estaría inmersa en desarrollar sus propios sensores LiDAR, los más usados para la conducción autónoma y principal bandera de Tesla. También podría indicar que el coche de Apple, que tantos altibajos ha sufrido, sigue en funcionamiento.

No obstante, este punto es delicado, ya que la construcción de estas naves no implica necesariamente la construcción de coches eléctricos. El golpe del gobierno de los Estados Unidos ha puesto en el punto de mira a Apple, que en un probable escenario estaría obligada a repatriar su industria a Estados Unidos y pasar de fabricar los iPhone en China a Estados Unidos. Estas naves podrían ser una respuesta premeditada a ese escenario. Además, la misma Tesla tiene una gigafactoría en la que fabrica estas baterías, por lo que si quiere comprarla, usaría estas mismas infraestructuras.

Si Apple compra Tesla, ambos saldrían ganando

Si Apple compra Tesla, podríamos estar ante un escenario inédito, pero no tan inesperado. Tesla no está en su mejor momento financiero, llegando incluso a quebrar en varias ocasiones. Con la salida del Tesla Model 3 la empresa sobrevivió, pero su estabilidad a día de hoy sigue en duda. No por nada el mismo Elon Musk dijo hace poco en un correo que, de no ajustarse en el siguiente trimestre, la empresa se quedaría sin dinero.

Una compra por parte de Apple beneficiaría ampliamente a los dos bandos. Para empezar, Apple avanzaría enormemente en el proyecto de su coche autónomo, ya que Tesla es una de las empresas más avanzadas en el sector (si no la que más), y toda esta tecnología se traduciría en pasos de gigantes para un proyecto que ya lleva muchos años con rumores y misterios a la espalda.

Elon Musk, por su parte, también tiene que ganar con este acuerdo. Para empezar, evitaría la bancarrota y, bajo el control de Apple, podría seguir teniendo sus proyectos y avances a salvo. Dependiendo del nivel de control de Apple, incluso Tesla podría seguir sacando modelos nuevos y realizando más proyectos, esta vez bajo el manto de Apple. Además podría usar el dinero de la venta para potenciar sus otras empresas, como SpaceX.

El liderazgo a nivel tecnológico de Tesla y su débil posición económica la hacen irresistible para una empresa tecnológica interesada en sus avances o una empresa automovilística. Por supuesto esto son todo especulaciones y hay muy poco material para poder decir claramente si nos veremos ante un escenario donde Apple compra Tesla. Pero no podemos descartar nada.