Desde el principio, el objetivo de Tesla ha sido popularizar los coches eléctricos, una tecnología que hasta no hace tanto era más propia de la ciencia ficción. No fue hasta que Tesla demostró lo que era posible con el Model S que otros fabricantes se sumaron (y algunos han reconocido que llegan tarde). Elon Musk ha realizado varias promesas a lo largo de estos años, y la principal ha sido ofrecer un coche eléctrico relativamente asequible; con la última decisión de la compañía, se acerca algo más a cumplirla.
Todas las versiones básicas de todos los Tesla a la venta han bajado de precio. Por lo tanto, eso incluye tanto el nuevo Model 3, el más asequible de todos, como al Model S y Model X, de gama más alta. En algunos casos se trata de una diferencia importante, aunque no todos los modelos parecen haberse visto afectados igual. También hay que recordar que hablamos siempre del precio base del coche; es posible que su precio final sea más alto si empiezas a “jugar” con el configurador.
Ahora los Tesla son más baratos
El Tesla Model 3 ahora empieza a partir de los 47.990 €, en su versión más barata, la “Autonomía Estándar plus”; recordemos que en EEUU originalmente este modelo tenía una versión de dos ruedas motrices mucho más barata, pero que no ha llegado a Europa. Esto supone una diferencia de unos 300 € respecto al precio con el que esta versión llegó a nuestro país. Además, una gran diferencia es que ahora el color sin coste es el blanco perla multicapas. Tesla es famosa por usar la táctica de Ford con el Model T original: ofrecer el coche en un color básico para abaratar los costes de producción; por lo tanto, si queremos un color diferente tenemos que pagar más. Ahora este color básico será el blanco (hasta ahora era el negro). Conseguirlo en negro nos costará 800 € más, y en los otros tres colores, 1.050 € más.
Las versiones más completas del Model 3 han bajado más de precio. La versión “Gran Autonomía” ahora cuesta 58.700 €, 400 € menos, pero donde realmente notamos la diferencia es en la versión “Performance”: ahora cuesta 64.290 €, nada menos que 5.810 € menos. Por lo tanto, la versión de mayor rendimiento es ahora mucho más atractiva.
Lo mismo podemos decir de los Model S y Model X. El primero ahora cuesta 87.800 € en su versión de “Gran Autonomía”, y 104.700 € en “Performance”. El Model X Gran Autonomía cuesta 93.600 €, y el Performance son 109.800 €. Eso son 4.300 € menos en el caso del Model S y 3.100 € en el caso del Model X.
¿Se han “tomado atajos” en la producción?
Esta rebaja de precios es bienvenida, excepto si eres un inversor; Tesla ha caído un 2% en bolsa desde el anuncio de los nuevos precios. Sin embargo, esa no es toda la historia. Hoy mismo también se ha publicado una investigación de la CNBC en la que se recogen testimonios de trabajadores de Tesla, en los que hablan de la situación laboral en las fábricas de la compañía. Además de denunciar las condiciones laborales, estos trabajadores afirman que el control de calidad de los coches es ahora más permisivo, con el objetivo de sacar más coches de fábrica más rápidamente y cubrir la demanda.
Según los testimonios y fotografías obtenidas por la CNBC, algunos coches salieron de la línea de producción sin tornillos, tuercas y otros componentes menores; son fallos que se suelen encontrar en la revisión, pero que la gerencia habría decidido pasar por alto para cumplir las cifras. Por lo tanto, esta bajada de precio podría venir precisamente en respuesta a este aumento en la producción. La calidad de la construcción de los Tesla es uno de los aspectos que suele ser más criticado, especialmente comparado con fabricantes veteranos; desde paneles mal encajados a piezas que faltan, es fácil encontrar historias en la red de los usuarios, pero hasta ahora no ha supuesto un serio problema de imagen para la compañía.