Hasta ahora, el cohche de producción más potente del mundo era el Rimac Concept Two, una bestia totalmente eléctrica que presumía de conseguir velocidades de vértigo. Ahora, le ha superado el que es ahora el coche de producción más potente del mundo: el Lotus Evija.
Este portento tecnológico totalmente eléctrico tiene unas características de infarto que entre otras cosas posee casi 2000 caballos de potencia y una carga rápida que hará las delicias de los más apurados; tarda en cargarse unos 9 minutos.
2.000 caballos de potencia puramente eléctrica: así es el Lotus Evija
Lotus no ha escatimado con el Evija, y pretende ser un golpe de intenciones en la mesa que además de impresionar en características impresiona también en precio. Este Evija será el primer coche eléctrico de Lotus y se reafirma como un hiperdeportivo épico donde los haya.
La exclusividad llega a tales límites como que el Evija tendrá una fabricación limitadísima: se realizarán únicamente 130 Lotus Evija y su precio empezará en los 1.7 millones de libras esterlinas (lo que al cambio en dólares serían unos 2.1 millones).
El que se ha convertido en el coche de producción más potente del mundo está equipado con 4 motores situados cada uno en una rueda que arrojan un total de potencia de 1972 CV embutidos en un peso de 1680 kilogramos. Lotus así asegura que este Evija es el “hiperdeportivo eléctrico de producción más ligero del mercado”.
La velocidad máxima que alcanza este Lotus Evija es de 320 kilómetros por hora y su aceleración es de 0 a 100 en menos de 3 segundos. En cuanto a la autonomía (ya que este coche es totalmente eléctrico), hablamos de hasta 400 kilómetros según el nuevo ciclo de homologación WLTP.
Pero uno de sus puntos más importantes es la carga; en cifras de Lotus, el Evija es capaz de cargar su batería en un 80% en tan solo 12 minutos siempre y cuando usemos cargadores de 300 kW. Por ahora los cargadores de 800 kW no están disponibles pero el Evija mira al futuro al ser compatibles con ellos, ofreciendo una monstruosa carga completa de 9 minutos si les damos uso.
En el apartado físico y sobre todo estético no encontramos reales diferencias junto a otros hipercoches eléctricos, con líneas aerodinámicas y un aspecto deportivo claramente agresivo. Sus líneas están especialmente diseñadas para mejorar la aerodinámica, pero no encontraremos elementos especialmente disrruptivos en este sentido (salvo si contamos detalles como los faros traseros o el logo de Lotus iluminado).
En el interior pasa algo muy similar; tenemos un panel digital detrás del volante y una consola central con botones táctiles y respuesta háptica. El volante y las vestiduras están forrados en tela de alcantara, pero de nuevo, no nos encontramos nada que se salga de la tangente de los hipercoches eléctricos. Aún queda mucho para ver locuras como la del último coche conceptual de Bentley.
Entre otros detalles especiales que podríamos calificar de innovaciones están la falta de espejos laterales y traseros sustituidos por cámaras, la ausencia de manijas en pos de un sistema de apertura sin llaves o unos faros de carretera que usan láseres para iluminar.
La producción del Evija empezará en el año 2020 y las reservas se realizarán en el siguiente año. Lotus espera que las reservas del Evija se agoten, algo muy a tener en cuenta dado el precio no apto para mortales que posee este hipercoche.