Estamos en pleno verano y es época de desplazamientos, de viajes y escapadas. Somos muchos los que durante los próximos días montaremos en nuestro vehículos para ir a disfrutar de unos días de descanso.
Según la Dirección General de Tráfico (DGT), en agosto se prevén más de 47 millones de desplazamientos de largo recorrido, una cifra que arrancará desde el 31 de julio con la segunda operación salida para muchos españoles que inician sus vacaciones.
Al igual que cuidamos nuestro equipaje, ante estos viajes también conviene preparar nuestros coches y vehículos. Desde Midas, cadena especializada en el mantenimiento del vehículo, junto con la piloto Kawasaki Ana Carrasco, ofrecen una serie de consejos para revisar y mantener de forma óptima el trío de elementos clave en la seguridad del vehículo que puede ayudarnos, literalmente, a evitar accidentes:
Cuida el estado de los neumáticos
Parece obvio pero, ¿cuándo fue la última vez que miraste el estado de tus neumáticos? Es lo único que nos mantiene en contacto con el asfalto y es clave mantener la presión correcta y comprobar que el estado general es bueno: las ruedas no deben tener deformaciones, golpes fuertes ni un desgaste irregular.
Comprueba la profundidad del dibujo: como referencia, ese dibujo del neumático nunca debe ser inferior a 1,6 milímetros, en ese caso estaría demasiado desgastado como para usarlo con seguridad. Ante un gran desplazamiento, también es conveniente ajustar la alineación con tal de mejorar el rodaje. Desde Midas recuerdan que es importante que los neumáticos estén equilibrados, así evitaremos vibraciones que directamente se transladan al interior del habitáculo. En los talleres se puede realizar el equilibrado de ruedas de forma sencilla, es un proceso esencial para asegurar la seguridad al volante.
Sistema de frenado a punto
El siguiente elemento clave que hay que supervisar antes de un viaje son los frenos. El sistema de frenado tiene que estar en perfectas condiciones: pastillas de freno, discos y líquido.
Es fundamental realizar un mantenimiento de todos esos elementos, ya que si uno de ellos está afectado, también perjudicará al resto, y en caso de fallo el desgaste se irá produciendo por la conducción. Los expertos de Midas recomiendan revisar pastillas y discos de freno cada 6 meses o 20.000 kilómetros, y el líquido de frenos cada dos años, aunque si estamos ante un largo viaje, conviene comprobarlo de forma especial.
Amortiguadores en buen estado
Y en tercer lugar hay que comprobar el estado de la amortiguación. Este sistema es esencial para asegurar que el coche está en perfectas condiciones para afrontar un viaje de larga distancia. El desgaste de estos elementos es progresivo y conviene revisarlo.
Se estima que cada 20.000 kilómetros debería hacerse una revisión de los amortiguadores, aunque esto varía dependiendo del tipo de uso que se le de al vehículo, y también de la propia edad del coche.
En definitiva, si quieres disfrutar realmente de las vacaciones de verano y tener unas vacaciones sin imprevistos, lo mejor que podemos hacer es revisar nuestro vehículo antes de comenzar, con especial hincapié en este triángulo de la seguridad que forman los neumáticos, el sistema de frenado y la amortiguación.