Apple es especial. Sus productos siempre están separados del resto por un aire de exclusividad que la compañía ha fomentado prácticamente desde el principio. Sí, existen muchos smartphones en el mercado, pero iPhone sólo hay uno (o tres, dependiendo del año).
Por eso, cuando Apple anunció que se iba a meter en el sector financiero con una tarjeta de crédito, sabíamos que no podía ser una tarjeta normal. Para empezar, la mayoría de los usuarios de Apple Card ni siquiera tendrán una tarjeta física, y realizarán todas las operaciones, como los pagos, directamente desde su iPhone.
Si quieres una tarjeta física, la tienes que pedir, pero a cambio se trata de una tarjeta única en el mercado. Fabricada en titanio, el nombre del propietario está grabado con láser, y el diseño es extremadamente simple y elegante; ayuda mucho que tenga grabado el número de la tarjeta, ya que este cambia para cada transacción por seguridad.
Los cuidados de la tarjeta de crédito de Apple
Sí, la Apple Card es un producto exclusivo, pero eso también significa que necesita unos cuidados exclusivos. Eso es lo que han descubierto los primeros usuarios estadounidenses, que por fin han podido conseguir la tarjeta después del lanzamiento inicial. Entre toda la documentación relacionada, han encontrado instrucciones para el mantenimiento de la tarjeta, pero eso no es lo más raro.
Según esta guía para propietarios, la tarjeta de Apple es extremadamente delicada, hasta el punto de que es necesario dar unos pasos concretos para su correcto mantenimiento. Por ejemplo, se recomienda limpiarla con un trapo de microfibra de manera "suave", y con un poco de propanol.
Pero más importante aún es dónde guardarla. Si tenías pensado meterla en tu cartera con el resto de tarjetas, que sepas que estarías cometiendo una blasfemia. Porque Apple afirma que, en ningún caso, la Apple Card puede tocar otras tarjetas.
No es que tenga miedo de infectarse con la plebe, es que la tarjeta puede rayarse fácilmente al contactar con otras tarjetas. Sí, puede que la estructura interna sea de titanio, pero el exterior es especialmente delicado y puedes acabar con daños estéticos.
No solo eso, sino que esta tarjeta no admite cualquier cartera. En concreto, Apple advierte que no usemos carteras de piel o denim, ya que pueden provocar un descoloramiento que no se quitará sólo con limpiarla. Por lo tanto, tu tarjeta puede adquirir un tono marrón muy desagradable.
Por lo tanto, si vas a pedir una Apple Card cuando llegue a nuestro país, acuérdate de comprarte una cartera nueva y comprar los productos de limpieza adecuados. Algo absurdo solo por una tarjeta, pero nadie dijo que presumir fuese fácil.