Vivimos un momento crucial para el sector de los productos gaming, que por si solo ha conseguido revitalizar las ventas de ordenadores que iban a la baja desde la última crisis económica. La competencia es cada vez más dura, con multitud de fabricantes y nuevas marcas; el nivel es muy alto, y los usuarios son cada vez más exigentes.
Nunca antes habíamos visto tantos productos de calidad lanzados al mercado al mismo tiempo. Pero eso también hace muy difícil que uno destaque por encima del resto; seamos sinceros, la mayoría de fabricantes ya ha alcanzado un cierto nivel, y es raro encontrarse las "pifias" de antes. Ya no vale cambiarle el color a un producto y ponerle "gaming" al final del nombre como se hacía antes.
En esta guerra, hay que evolucionar constantemente. Quedar por delante, aunque sea por milésimas. Y una de las marcas que más está apostando por esto es Razer. No en vano, no hace mucho analizábamos uno de los teclados más innovadores que hemos visto, el Huntsman Elite. Con tecnología optomecánica, puede suponer el primer paso a una nueva generación de teclados para usuarios cada vez más exigentes. Pero entonces, ¿dónde deja eso a los mejores teclados mecánicos de la compañía?
Razer Blackwidow Elite ¿hemos llegado al límite de los mecánicos?
El Blackwidow Elite es un teclado gaming completo, con teclado numérico y teclas multimedia. Se trata de un modelo claramente orientado a jugadores o a usuarios que busquen dar un salto evidente desde los teclados comunes, y digo eso basándome en su gran fortaleza: las propias teclas.
Con el Blackwidow Elite, Razer ha implementado la última evolución de su diseño de switches mecánicos. Por lo tanto, este teclado no usa switches de Cherry, sino que Razer ha vuelto a optar por un diseño propio que lo diferencia del resto, principalmente para centrarse en lo que quieren sus usuarios (que suelen ser jugadores).
Un nuevo switch mecánico mejorado
La principal diferencia de este diseño es, en realidad, muy pequeña en teoría. Son dos paneles laterales a cada lado del switch, que casi rodean la estructura central. Parece un cambio nimio, pero es importante, porque esas piezas de plástico permiten conseguir una mayor estabilidad cuando tecleamos, especialmente si lo hacemos de manera agresiva.
Si sueles "machacar" las teclas, puede que hayas notado que a veces estas vibran o se mueven un poco con cada golpe. Personalmente, es un problema que conozco bien, ya que soy bastante "basto" con mis teclados. Es de esas cosas de las que no te das cuenta hasta que desaparecen, y eso es lo que sentí con el Blackwidow Elite en cuanto empecé a escribir a lo loco en él.
La estabilidad adicional de esas piezas de plástico supone un aumento en la confianza cuando escribo o golpeo teclas a lo loco en mis juegos. No siento que el teclado puede deshacerse, y el movimiento de las teclas es mínimo, lo que a su vez se traduce en una mayor precisión en los momentos más estresantes.
Razer promete una vida útil de 80 millones de pulsaciones, y aunque en los meses que me han cedido este teclado no he podido llegar a semejante cifra, sí que puedo decir que mis teclados suelen "quedar para el arrastre" en poco tiempo. Por ahora, el Blackwidow Elite no da signos de fatiga.
Además, es buena noticia que Razer haya mejorado la protección contra polvo y líquidos, teniendo en cuenta que suelo comer delante del teclado y tengo un gato. Una simple limpieza deja el teclado como nuevo, un proceso sencillo porque las teclas se quitan fácilmente y apenas hay recovecos.
Sensaciones naturales a las que hay que acostumbrarse
Una vez que reciben nuestros golpes, los switches de Razer se comportan extremadamente bien. La unidad probada contaba con los switches verdes, que Razer define como "táctiles y clicky"; en otras palabras, hacen ruido. También está disponible con switches naranjas ("táctiles y silenciosos") y amarillos ("lineales y silenciosos").
Pero si vas a jugar y te gusta el tacto tradicional de los teclados mecánicos, los verdes son los que quieres.
Los switches verdes de Razer tienen un tacto muy estudiado, en el que el "click" se produce a algo menos de la mitad del recorrido. Además, son bastante duros, algo que he notado especialmente después de largas jornadas de trabajo; digamos que entonces no me quedan muchas ganas de ponerme a jugar.
Son unos switches muy particulares, algo diferentes a lo que solemos ver en el mercado, y eso puede hacer que tardes un poco en acostumbrarte a ellos; pero una vez que lo consigues, comprenderás porqué tenían que ser así.
Y es que, una vez que amaestras este teclado, cada pulsación se convierte en un acto reflejo. La fuerza necesaria, que antes te parecía excesiva, ahora es la justa para sentir que realmente estás pulsando la tecla que quieres. El recorrido, que antes te parecía demasiado agresivo, ahora está en el equilibrio justo que necesitas.
Sí, sin duda hace falta adaptarse a este teclado. Pero la verdad es que merece la pena. Tanto en videojuegos como escribiendo un e-mail, sientes que cada pulsación tiene propósito.
Ergonomía adecuada con un accesorio que se agradece
El Blackwidow Elite es un teclado completo, con teclado numérico. Si eso es algo bueno o no, dependerá de tu situación, pero llama la atención que, entre toda la variedad de teclados que Razer ofrece, no haya ninguno sin teclado numérico, que pueden ser mas ergonómicos, especialmente si tenemos el ratón al lado del teclado como es lo habitual.
Con sus 44,5 cm x 16 cm, tiene un tamaño considerable; yo soy de manos grandes, y en ese sentido me viene muy bien, pero es algo a tener en cuenta. Pero todo esto se compensa por un añadido muy agradecido: un reposa-muñecas.
Al igual que el Huntsman Elite, el BlackWidow Elite tiene el problema de que puede ser demasiado alto, y por eso se incluye un reposa-muñecas que nos facilitará las cosas; sin embargo, en este caso no tiene iluminación integrada, y la forma es algo diferente. Pero por lo demás, los materiales usados son de calidad y resistentes al sudor. El único detalle es el logotipo de Razer en el centro, pero al ser negro también le da un toque elegante al conjunto.
¿Faltan teclas?
Durante mucho tiempo, tal vez demasiado, se asoció la imagen de "teclado gaming" con adefesios llenos de "teclas especiales" y pantallas LCD. Afortunadamente, hemos pasado esa época, y el BlackWidow Elite es una muestra de ello. Aquí no encontrarás teclas de dudosa utilidad: se trata de un teclado completo simple y sencillo.
Sólo hay una excepción: las teclas multimedia. Se encuentran en la esquina superior derecha, y consisten en una tecla de retroceso, otra de reproducir/pausa, otra de adelanto, y por último, una gran tecla de silencio integrada en una rueda de volumen. Seré sincero y diré que nunca usé estas teclas, sólo lo justo para poder escribir sobre ellas. No tienen el mismo tacto ni forma que el resto, y simplemente cumplen su función; no merecen más alabanzas ni tampoco más críticas. Si acaso, puede resultar algo extraño que por defecto, el botón más grande no sea el de pausa, sino el de silenciar.
Pero lo que verdaderamente eché de menos en el BlackWidow Elite es... más teclas. Sí, lo sé, más arriba me he quejado del tamaño del teclado y de la inclusión del teclado numérico. Pero, sorprendentemente, este teclado no tiene teclas de macro, que podamos programar para que ejecuten varias acciones con una sola pulsación.
Razer Synapse, imprescindible
Bueno, eso que acabo de decir no es exactamente cierto. En realidad, todas las teclas del BlackWidow Elite pueden ser teclas macros; el problema es que esta implementación se hace por software, y no directamente en el teclado.
Aquí es donde entra Razer Synapse, el programa con el que podemos controlar y configurar todos nuestros dispositivos de Razer, y que es poco menos que imprescindible. Es con Synapse que realmente podemos explorar todas las posibilidades de nuestros dispositivos; sin este programa, es como si hubiésemos comprado sólo la mitad del producto.
En el caso del BlackWidow Elite, con Synapse podemos configurar las macros, y hacer que cualquier tecla que queramos ejecute una combinación cuando la pulsemos. Sólo tenemos que iniciar el programa, pulsar en la tecla que queremos cambiar, y se abrirá un menú lateral en el que podemos hacer literalmente lo que queramos.
¿Quieres que la tecla R ahora sea "Mayúsculas + R"? Puedes hacerlo. ¿Quieres que la barra espaciadora sea un click de ratón? Puedes hacerlo. ¿Quieres ejecutar un programa específico cuando pulses una combinación de teclas? ¿Quieres cambiar la iluminación con las teclas direccionales? ¿Quieres deshabilitar una tecla? Seguro que ya lo has pillado.
Sólo hay dos teclas que no puede usar, F9 y F10, porque esas son las teclas usadas para activar y desactivar las macros; muy útil, por ejemplo, si queremos activarlas sólo cuando estamos jugando. Hasta las teclas multimedia se pueden cambiar por lo que quieras.
Iluminación RGB, seña de identidad de Razer
Estamos hablando de un producto Razer, así que, por supuesto, el BlackWidow Elite tiene iluminación RGB en todas las teclas, que también podemos configurar en Synapse. Podemos variar el brillo, definir cuánto tiempo queremos que estén encendidas, o incluso sincronizar la iluminación con otros dispositivos Razer para que hagan lo mismo. De esta manera, siempre irás conjuntado.
Hay todo tipo de efectos disponibles, desde los que pasan por una variedad de colores hasta los que añaden una "pulsación" o incluso puedes hacer que cambien con las aplicaciones que estás usando. Pero tal vez los más espectaculares son los que cambian la iluminación dependiendo del sonido, o los que generan ondas con cada pulsación que se expanden por el resto del teclado.
El uso inteligente de la iluminación siempre ha sido una característica de los productos de Razer, y el BlackWidow Elite es justo lo que nos esperamos en este sentido. Y lo mejor, es que lo consigue con un diseño sobrio en negro, sin excentricidades ni exageraciones. Incluso si quieres, puedes desactivar la iluminación completamente y conseguir un teclado negro bastante elegante.
¿Tienen futuro los teclados mecánicos?
Suena extraño que diga esto, pero da la sensación de que el BlackWidow Elite es el fin del camino. Que ya no vamos a poder mejorar mucho más los switches mecánicos, y que deberíamos empezar a mirar más allá.
Suena tal vez algo fuerte, pero es lo que ocurre cuando te encuentras un producto que no sabes cómo mejorar. Sí, hay detalles que personalmente me gustaría cambiar, y depender tanto del software Synapse para todo sigue siendo una de mis pocas quejas reales. Pero seamos sinceros, no son errores como tales.
Claro, que es muy probable que Razer y el resto de fabricantes me contradiga, lanzando una nueva evolución de los switches mecánicos inmensamente superiores y yo quede como un estúpido. Pero hasta que eso ocurra, el BlackWidow Elite debería estar, como mínimo, en tu lista si piensas en cambiar de teclado.
El Razer BlackWidow Elite está disponible por 179.99 €, pero es posible encontrarlo en sitios como Amazon por poco más de 100 €.