Brazos robot que te sirven el café, la iniciativa que está siendo todo un éxito
¿Te imaginas ir a un restaurante a pedir un café y que te sirvieran brazos robot? Esta iniciativa ya se está probando en algunos establecimientos.
25 diciembre, 2019 18:03Noticias relacionadas
Puede parecer a ciencia ficción el quie siquiera existan robots que nos atiendan en diferentes servicios. Es algo propio de las películas y por ende cuando uno de estos aparatos se presenta ante los clientes se forma una situación más rara que un perro verde. Lo cierto es que una gran opción frente a la "omnipotencia" de los robots son los brazos robot.
Es cierto que puede sonar raro. ¿Cómo va a poder atendernos un simple brazo robótico que no puede moverse de su posición estática? Está siendo probado ya en establecimientos como Cafe X, una "cafetería" situada en el Aeropuerto Internacional de San José, en San Francisco. Un bar que tiene la peculiaridad de que te sirve un brazo robot.
¿Cómo puede funcionar una idea así, sobre todo en un aeropuerto? El café, aparentemente, está siendo todo un éxito; atiende a más de 15 millones de pasajeros al año con 450 salidas y entradas diarias. Y esta idea podría implantarse a más servicios.
El café en el que los brazos robot son tus camareros
¿Cómo funciona este café? El principal atractivo de Cafe X es que dicho brazo que nos atiende puede servirnos el café y el té que queramos, sin excepciones. El establecimiento también ofrece pasteles y otro tipo de bebidas, como limonadas con infusión de nitrógeno. Según cuenta el CEO de Cafe X a Venture Beat, Henry Hu:
"Básicamente, podemos producir cualquier tipo de bebida. [El robot] puede hacer cualquier cosa que se ajuste a nuestra categoría, como una cerveza caliente o fría, como lo desee. Cuando no está ocupado, baila. Siempre se está moviendo".
Lo del baile no es casual; el robot tiene una serie de movimientos que intentan hacer la espera ante el servicio más amena. El brazo se puede mover para bailar al ritmo de la música, ya sea ambiental o no, para crear una sensación de estética futurista. Las interfaces de uso de estos robots son sencillas y modernas, y el sistema está pensado para que el robot no cause estropicios.
Cuando el robot pone una taza de café en una bandeja para servir es como una esclusa de aire. Pone el café y se cierra una puerta interior de vidrio. Una puerta exterior al vidrio se abre para que el usuario coja el café sin problemas. Esto evita posibles problemas con clientes. Aunque tampoco es que pueda haber muchos problemas; la seguridad del establecimiento está fuertemente vigilada y nadie podría hacer daño al robot sin meterse en problemas serios.
El éxito del café no tiene precedentes para Hu: han recaudado más de 15 millones de dólares y tienen más de 40 empleados. Además, Hu planea abrir otras sucursales de Cafe X en otros sitios del mundo, principalmente aeropuertos. Además, entre el 50 y el 60% de los clientes que pasan por Cafe X son clientes habituales que suelen repetir cuando van al establecimiento.
¿Destruirán estos robots el sector servicios?
Hu cree por su parte que estos robots no sustituirán a los camareros. La inspiración para esta idea le vino después de esperar unos 30 minutos a que un camarero le trajera un café, y lo que busca en base a esta idea es celeridad. Hu observa su proyecto como una oportunidad para generar empleo.
"No solo estamos creando trabajos más interesantes, menos estresantes, menos exigentes físicamente para el trabajador minorista, sino que también tenemos a toda esta empresa que está diseñando, creando y fabricando cosas. Los trabajos conducen a una mejor calidad de vida".
Además, Hu planea abrir un horario de 24 horas. En esas horas más problemáticas se añadirá un trabajador que supervise todo el trabajo y apoye al brazo, por lo que cumple con su "palabra" de crear empleo y no destruirlo.
El robot no dispone de inteligencia artificial, sino que está programado para hacer tareas específicas. Basa todo su trabajo en medidas; por ejemplo, si se necesita más hielo, pesará el vaso y añadirá más hielo si así lo necesita. Por contra el brazo está acompañado de programadores y asistentes, ya que si el robot se estropea se necesita una reparación inmediata. Por otra parte, estos asistentes pueden ayudar a los robots con los pedidos algo más complicados, ya sea a través del smartphone o a través de una tablet.
Sobre el tema de la inteligencia artificial, Hu no la ve como algo malo pero sí es algo reticente ante ella. "La inteligencia artificial podría ser necesaria cuando se alcance una cierta capacidad de producción y se desee obtener mayor eficiencia. Pero eso no ha sido necesario hasta ahora".