Puede que el concepto de ruedas sin aire sea algo extraño para ti. ¿Cómo pueden funcionar unas ruedas... sin aire? Existen marcas como Bridgestone o Michelín que están probando esta tecnología que podría ser, en un futuro, la alternativa a los clásicos neumáticos.
No es para menos; tienen características que las hacen únicas además de el ser completamente inmune a pinchazos. Son muy resistentes, no necesitan aire para funcionar (obviamente) y soportan una gran carga de máximo 2.267 kilos de presión.
Ahora, Bridgestone ha decidido que comercializará este tipo de ruedas para camiones y bicicletas. El fabricante japonés ha decidido sacar al mercado dicha tecnología después de haberla probado en numerosas condiciones.
Así son las ruedas sin aire
Según explica en Automotive News el director ejecutivo de nuevas soluciones de ingeniería en Bridgestone en el mercado americano, John Kempel, la firma comercializará estas ruedas para camiones. La razón, explica Kempel, está en los problemas derivados de las ruedas convencionales.
Los problemas que menciona el ejecutivo son varios. Para empezar, aproximadamente cada 13.000 kilómetros los neumáticos suelen tener problemas debido a la enorme presión que sufren. Los camioneros tienen que estar revisando la presión de los neumáticos cada cierto tiempo en los períodos de viaje, lo que supone más coste.
La solución de Bridgestone se basa en ruedas sin aire fabricadas en termoplástico reciclado. Como es obvio, estas ruedas se quitan de encima el problema de la presión ya que pueden aguantar grandes cantidades de peso y no necesitan ser revisadas. No pierden aire y al ser a prueba de pinchazos, pueden evitar un desastre tanto a nivel logístico como a nivel vial, ya que esto podría desembocar en un accidente.
Una propuesta inteligente
Si habéis visto estas ruedas antes, sabréis que no se venden precisamente a vehículos grandes. Están pensadas para productos pequeños, como bicicletas o utensilios del hogar que precisen ruedas. Debido a su delgadez es fácil pensar que estas ruedas son endebles y que estas podrían provocar un accidente todavía más grave en caso de romperse.
La decisión de Bridgestone de empezar por los "grandes" no es casual. Esta vez, Bridgestone no aboga por intentar vender estas ruedas al usuario normal de automóvil, el cuál las podría ver demasiado extrañas (o incluso, avergonzantes). Se pretende solucionar un problema logístico real de un colectivo específico.
Si los camiones adoptan esta tecnología, poco a poco irán apareciendo por la carretera y con el tiempo la presencia de estos neumáticos será mayor. Si estos camiones llevan este tipo de ruedas, deben ser buenas, ¿no? Y los camiones no son su único objetivo.
Con motivo de los Juegos Olímpicos de Tokio, Bridgestone permitirá a los visitantes que asistan a los Juegos el probar de manera gratuita bicicletas con estas ruedas equipadas. Así, pretenderá acercar esta tecnología al colectivo común de cara a un lanzamiento en el mercado de las bicicletas.
Origen | Automotive News