Samsung ha presentado hoy en San Francisco su segundo teléfono plegable, el Galaxy Z Flip, que viene a perfeccionar la técnica que la compañía surcoreana inauguró el pasado año con el Galaxy Fold. En esta ocasión, Samsung ha optado por un diseño tipo concha, como el Motorola Razr, con lo que parece confirmar la tendencia del mercado de optar por esta nueva disposición.
"En Samsung, nos sentimos alentados por la emoción por el Galaxy Fold. El Galaxy Z Flip es un siguiente paso importante, ya que buscamos construir una categoría plegable al ofrecer a los consumidores un nuevo factor de forma, una nueva pantalla y, lo que es más importante, un nuevo tipo de experiencia móvil ", ha explicado TM Roh, presidente y jefe de dispositivos móviles que se estrenaba en su cargo durante la presentación de la nueva familia Galaxy S20.
El nuevo Galaxy Z Flip cuenta con una pantalla interior AMOLED FHD+ de 6,7 pulgadas, lo que implica una disposición de 21,9:9 y a una resolución de 2.636x1.080. Como particularidad, la pantalla que integra no se trata sólo de un panel flexible, sino que también incorpora un nuevo cristal que promete una durabilidad que evitaría así algunos de los problemas de arañazo del Flod. En la parte exterior cuenta por su parte con una pequeña pantalla Super AMOLED de apenas 1,1 pulgadas que sirve para ver quién llama así como coger el teléfono o colgar.
De este modo, el Galaxy Z Flip cuenta con la primera pantalla de vidrio plegable de Samsung. Además de ser más resistente lo hace más delgado y con una apariencia más premium. El recorte de la cámara centrada en la pantalla en la parte superior también significa que no hay notch, siguiendo la línea de diseño que se implantó con el Galaxy S10.
Otro de los aspectos que se ha mejorado ha sido el sistema de bisagra. Bautizado como Hideaway, la compañía presume que es "una obra de arte de ingeniería pues es suave y estable", la idea es que el Z Flip puede permanecer abierto en una variedad de ángulos, lo que abre la posibilidad a que, por ejemplo, se pueda usar a modo de trípode para tomar selfies.
En su interior el Galaxy Z Flip Cuenta con un procesador Octa-Core de 7 nanómetros, 8 GB de RAM con 256 GB de almacenamiento interno. Asimismo, cuenta con una batería de 3.300 mAh, con lo que sobre el papel se presenta como una alternativa superior al Razr de Motorola.
Con respecto a sus cámaras, en la parte interior dispone de una lente para selfies de 10 megapíxeles (f/F2.4), mientras que cuenta con una doble cámara principal con un ultra gran angular de 12 megapíxeles (f/2.2) así como una lente principal de 12 megapíxeles (f/1.) con sistema de estabilización de imagen óptica y zoom digital de hasta 8x.
Con respecto a su disponibilidad, el Galaxy Z Flip llegará al mercado por 1.500 euros. Lo hará en un primer lugar "en cantidades limitadas" en los colores Mirror Purple y Mirror Black, comenzando en mercados seleccionados, incluyendo EEUU, Corea y España este mismo viernes 14 de febrero.