Las cancelaciones de eventos y la incertidumbre acerca de la producción de dispositivos están a la orden del día por culpa del dichoso coronavirus. El brote se cobra víctimas tecnológicas allá por donde pasa, y la última en caer ha sido la Nikon D6, la cámara estrella de la firma fotográfica pensada para profesionales deportivos. Esta ha sido retrasada hasta, presumiblemente, mayo.
El retraso de la Nikon es un mal augurio de lo que podría ser una realidad: más retrasos. Y estamos en un año importante a nivel tecnológico, ya que se espera que llegue el iPhone 12, la renovación del smartphone de Apple más ambiciosa (si nos ceñimos a los rumores). Pero, ¿qué tiene que ver la Nikon D6 con el iPhone 12? El coronavirus, el cierre de líneas de producción y por ende retraso en la fabricación y distribución de componentes electrónicos, tal y como se apunta en The Verge.
Porque esos componentes que constituyen las cámaras fotográficas también pueden correr la misma suerte que los componentes de los de los smartphones de Apple, enfrentándonos a una dura realidad. Que no veríamos el iPhone 12 asomar la patita en el mes de septiembre, como es habitual.
Líneas de producción cerradas
Un puesto de trabajo, en especial una línea de producción, puede ser el foco perfecto para la propagación de un virus. Se cierran las líneas y se establecen cuarentenas para evitar la propagación del coronavirus, más que para evitar muertes en un virus con una tasa de mortalidad muy baja. Esatas cuarentenas también pueden significar teletrabajo o resultar en cierres temporales de plantas de producción.
El motivo que enarbola Nikon para retrasar su D6 reside en los componentes de la D6, cuyo proveedor habría sido afectado por el coronavirus. Los sensores de cámara son uno de los componentes más afectados, provocando que la mismísima Sony advierta acerca del problema del COVID sobre estas piezas. Este patrón se podría repetir, máxime con tantos rumores y analistas aportando su opinión a expensas de estos posibles retrasos.
La incertidumbre del coronavirus
No faltan noticias acerca de la incertidumbre creada por el coronavirus; Apple no recuperaría la producción hasta abril y el iPhone 9, más que rumoreado sucesor del iPhone SE no llegaría en marzo sino algo más tarde. Por extensión, no sería raro que si el iPhone 9 se viera afectado por el coronavirus, lo mismo pasase con el iPhone 12 y pasara de presentarse en septiembre a octubre ante problemas en la producción de piezas, especialmente en los sensores de cámara.
Por si fuera poco, a estos problemas se le suman otros. Sí, este año será el de la Xbox Series X y la PS5 y debido a que sus líneas de producción son las más susceptibles de sufrir los problemas del COVID-19, existe la idea de que correrán el mismo destino que la Nikon D6. Aunque no se sabe, por mucho que AMD (fabricante de su GPU y CPU) asegure que se lanzarán en Navidades de este año como estaba previsto, según BGR.