Es más que probable que hayas visto en los medios de comunicación las promesas de Neuralink, uno de los muchos proyectos del magnate Elon Musk que, en esta ocasión, promete permitir a los humanos usar sus mentes para controlar dispositivos electrónicos. Un proyecto que si bien no ha dado resultados en algunos países como España, sí que tiene cosas que mostrar.
En este caso, Neuralink nos presenta a Pager, un mono de 9 años de edad que en el metraje que veremos a continuación se dispone a jugar al famoso Pong... con la mente. Este vídeo de presentación busca mostrar cómo funciona el proyecto Neuralink en un ser calificado como 'inteligente'.
Es la primera vez que vemos una demostración real de Neuralink, después de años de pruebas con otros animales. Según podemos leer en The Verge y en la web propia de Neuralink, el mono consigue jugar al título usando únicamente su mente, es decir, una de las aplicaciones del proyecto.
Jugando a Pong con la mente
El vídeo explica específicamente el proceso de demostración. Lo primero es lo primero: los investigadores enseñaron a Pager a usar el joystick que vemos en el vídeo con recompensas asociadas. El equipo implantó una serie de electrodos en un dispositivo N1 Link que, a su vez, se encuentra en el brazo de la corteza motora así como en áreas específicas de sus manos. Concretamente, instalaron más de 1.000 electrodos en el N1 Link.
La corteza motora se encarga de la planificación del sujeto y de la ejecución de sus movimientos. "Colocamos Links bilateralmente: uno en la corteza motora izquierda y otro en la corteza motora derecha", según la propia compañía. Una vez que Pager supo cómo manejar el joystick, el equipo se dispuso a hacer funcionar al chip, que analizó toda la información de las neuronas que participaban en el proceso y todas las partes del mismo que actuaban con cada movimiento.
Pasado un tiempo, se deshicieron del joystick para demostrar que, gracias a la implementación de estos chips, el mono era capaz de manejar Pong con el chip y su cerebro, nada más. Algo que suena fácil pero que ha llevado años y años de investigación que han desembocado en este experimento que podemos ver en vídeo.
La idea, según Neuralink, es conseguir un sistema de interfaz neuronal directa totalmente inalámbrico, implantable y que por supuesto nos de todas las garantías clínicas y saludables. De hecho, tanto es así que este chip, asegura el equipo, se puede conectar a un smartphone para poder ser controlado desde ahí. De hecho, es algo que se demuestra en el vídeo de Pager.
Musk saca pecho
Musk no ha tardado en publicar una serie de tuits al respecto. Dado el historial del magnate, hemos de ser cautos y tomar sus declaraciones con pinzas. Especialmente dado que el propio Musk ha dicho que alguien "con parálisis" podrá usar su smartphone con la mente "más rápido que alguien que usa pulgares". Un futuro que parece, incluso después de esta demostración, bastante lejano.
Por si fuera poco, también ha asegurado que futuras versiones del proyecto "podrán desviar señales de Neuralinks en el cerebro a Neuralinks en grupos de neuronas sensoriales / motoras corporales, permitiendo así [...] que los parapléjicos vuelvan a caminar". De nuevo, promesas que difícilmente se plasman en algo tangible más allá del experimento en vídeo con Pager.
El de Neuralink no es, ni mucho menos, el primer proyecto que busca controlar objetos con la mente o al menos establecer conexiones entre nuestro cerebro y sistemas o tareas actuales. Facebook presentó el pasado mes de marzo una nueva tecnología que interpreta las señales nerviosas para aplicar movimientos a la realidad aumentada mediante una pulsera.