Vivimos una revolución del audio. Los auriculares y dispositivos de escucha de música personal nos acompañan más que nunca y la calidad y variedad ha inundado el mercado. Entre ellos destacan los auriculares de diadema inalámbricos con cancelación de ruido, aunque Sony los popularizó, en España podemos encontrar ya opciones de todo tipo.
Ahora, el último en apuntarse a competir en este segmento ha sido Razer. El gigante del gaming ha dado un paso más allá para acercarse al mercado global de consumo haciendo lo que mejor sabe hacer: productos con una alta experiencia para el usuario. Con esos mimbres llegan los Razer Opus, unos auriculares de diadema con cancelación de ruido que se desmarcan de los jugones para aspirar a todo.
Los Opus se colocan ahora mismo como una de una de las opciones más equilibradas del mercado en cuanto a calidad y precio. Se encuentran en la web de Razer por debajo de los 160€, pero al mismo tiempo destacan por sonido y comodidad. Hemos pasado unas semanas con ellos, y os contamos nuestra experiencia.
Auriculares para el día a día
Razer no es nueva en el mercado del audio. Actualmente en su web se pueden más de 40 de sonido de todo tipo. Desde la barra de sonido Leviathan hasta sus auriculares gaming Nari Ultimate, pasando por su rival de los AirPods, los Hammerhead True Wireless. Sin embargo, hasta ahora no tenía unos auriculares circumaurales pensados directamente para el público general.
Están diseñados para acompañarnos en el día a día. Cuando vamos en transporte público, en un viaje, cuando vamos por la calle, para estar en casa viendo series o películas, y por supuesto, para jugar. Y es que aunque no sea su característica principal, también incluyen modo juego para dar respuesta a su público más fiel.
Éstos sin embargo son el antónimo de otros modelos de la compañía, como sus populares Kraken. Los Opus son discretos, refinados, elegantes y se acercan más al estilo de los WH-1000XM4 de Sony que a cualquier otro periférico de la serpiente trenzada. Es más su llamativo logo no lo encontraremos en ellos salvo que vayamos a la edición especial Bathing Ape.
Sin embargo, lo mejor del diseño es que son cómodos. Se ajustan bien a la cabeza con una buena distribución del peso (265 gramos), así como cuenta con una terminación de cuero sintético felpada que cubre una espuma viscolástica confortable y que no transmite calor. Además, hemos conseguido algo más de 26 horas de autonomía -tiempo superior al que marca Razer-.
También son cómodos de llevar. Son plegables y su tamaño queda reducido considerablemente por si los queremos guardar en una mochilla o en el bolsillo de un abrigo. Eso sí, a diferencia de los Sony aquí los controles los encontraremos en una serie de botones en el lateral del auricular y no dispondremos de panel táctil. Un sacrificio que merece la pena por ajustar el precio.
En el auricular derecho encontramos el botón de encendido (que también sirve para cambiar entre modos de cancelación de ruido), los botones de volumen, el Play (que también se usa para el modo gaming), así como la toma de USB-C y la salida de conexión de 3,5 mm.
THX y cancelación de ruido
Pero vayamos a lo importante, a la calidad de sonido. Aquí los Razer Opus se desenvuelven de manera notable, quizá no son los auriculares que un audiófilo usaría a diario y optaría por otras opciones más avanzadas (y caras), pero se desenvuelve mejor que otros rivales de su categoría o de mayor precio.
Tenemos unos auriculares con un sonido equilibrado donde los graves están muy conseguidos y su presencia es destacada aunque sin que lleguen a eclipsar. Tanto la voz como las frecuencias altas rinden bien y, aunque en los agudos quizá falta recorrido, el desempeño general es notable.
Más allá de eso, desde la aplicación móvil tendremos la capacidad de ajustar hasta cinco perfiles de audio del ecualizador: claridad optimizada, graves optimizados, amplificado, voz y THX.
Y es que estos Opus cuentan con la certificación de THX, el programa que certifica que un dispositivo de audio cuenta con un estatus suficiente de calidad para marcarse como referencia del segmento premium de audio personal. Pone especial atención en la frecuencia de respuesta, la baja distorsión a volúmenes altos y el aislamiento del ruido.
Más allá de la calidad de sonido, el otro gran reclamo de estos Opus es su capacidad de cancelación de ruido activa. Es, sin duda, una de las funcionalidades más reclamadas entre los compradores de auriculares hoy en día, y Razer apuesta por ella en su modelo de gran consumo.
Los Razer Opus cuentan con una cancelación de ruido activa híbrida. Encontramos un micrófono externo y otro interno en cada auricular, ambos se combinan para anular el ruido del exterior. La respuesta es buena y el sistema funciona bien ya que la cancelación pasiva del diseño no llega a aislar por completo.
Determinadas frecuencias o ruidos, especialmente si no son continuos los escucharemos, pero logras aislarte sin necesidad de subir el volumen a niveles altos, donde quedas por completo inmerso en la música. Hay otras opciones que aíslan más, pero los Opus aíslan muy bien.
Además, el sistema de cancelación de ruido permite variar entre activado, apagado o transparencia, con lo que si queremos estar alerta del tráfico o lo que sucede por la calle si vamos andando, funciona muy bien.
¿Me los compro?
Los Razer Opus han sido una de las sorpresas del año. No sólo porque la compañía del gaming haya lanzado unos auriculares de consumo para todos los públicos, sino porque lo ha hecho con el buen saber hacer que da el ser un veterano lanzando periféricos.
Aunque el precio oficial es de 209,99 euros, se pueden encontrar por 157 euros, lo que le convierten en una de las mejores opciones de calidad y precio del mercado. Son sustancialmente más baratos que los 322 euros de los Sony WH-1000XM4, o los 229 euros de los FreeBuds Studio de Huawei, con los que viene a competir y de los que no les separa tanto.
Y es que los Razer Opus devuelven una experiencia de sonido pero a menor precio. Si nos hacemos con los Opus tendremos unos auriculares de gama alta, cómodos y con una buena cancelación de ruido. Sin embargo, sí que hay distancia con los Sony, aunque claro, le separan casi 200 euros de distancia, una diferencia de precio que ya cada uno tiene que valorar hasta qué punto le merece la pena.
También te puede interesar
- Probamos los 'cascos' inalámbricos Audio-Technica con los que amar la música
- Probamos los AirPods Max de Apple: ven por la música, llévate una experiencia de cine
- ¿Merecen la pena unos auriculares de 800 euros? Probamos los Beoplay H95
- Probamos los Shure Aonic 50: unos auriculares inalámbricos para inconformistas