Razer Blade 15, análisis: el portátil gaming que llevamos años esperando
El Razer Blade 15 por fin ha llegado a España, uno de los portátiles gaming más deseados del mercado, pero ¿cumple con las altas expectativas que tenemos?
6 mayo, 2021 00:06Noticias relacionadas
Cuando me presento socialmente como escritor en un medio de tecnología, la reacción casi siempre ha sido de envidia (eso, y confusión). Puedo probar los últimos dispositivos del mercado, disfrutar de las últimas innovaciones y en ocasiones, lo hago antes que nadie en España.
Y es cierto que he podido probar algunos de los ordenadores, smartphones y productos tecnológicos más punteros; no hace mucho disfruté de un ordenador gaming con dos pantallas de los que atraen miradas. El chascarrillo que siempre sigue es "lo malo es que no son tuyos, ¿verdad? jajaja?", pero para mí, eso nunca ha sido lo peor.
Lo peor es saber que existe un producto innovador y avanzado, y no poder probarlo. Eso es lo que me ha pasado con la gama de portátiles de Razer durante años; he informado de cada lanzamiento, con la esperanza de que, esta vez sí, saliese en España. La espera ha terminado, con la llegada del Razer Blade 15 con un precio base de 1.799 euros.
Razer Blade 15
Tamaño pantalla | 15,6 pulgadas |
Resolución y frecuencia | Modelo básico: FHD a 144 Hz o QHD a 165 Hz Modelo avanzado: FHD a 360 Hz (unidad probada), QHD a 240 Hz o OLED 4K táctil |
Procesador | Intel Core i7 10ª gen. Modelo básico: 6 núcleos Modelo avanzado: 8 núcleos |
Gráficos | Modelo básico: hasta GeForce RTX 3070. Modelo avanzado: hasta GeForce RTX 3080 |
Almacenamiento | Modelo básico: 512 GB PCIe Modelo avanzado: 1 TB PCIe |
Memoria RAM | Modelo básico: 16 GB Modelo avanzado: 16 GB o 32 GB |
Refrigeración | Modelo básico: Tubo termosifón bifásico Modelo avanzado: Cámara de vapor |
Teclado | Modelo básico: RGB por zonas Modelo avanzado: RGB por tecla |
Puertos adicionales | Modelo básico: Gigabit Ethernet Modelo avanzado: lector de tarjetas SD |
El Razer Blade siempre ha presumido de ser una de las mejores alternativas para videojuegos; eso, si vivías en los Estados Unidos, por supuesto. Razer tiene presencia en España, pero hasta ahora se ha limitado a sus populares periféricos, como ratones ultrarrápidos, teclados gaming o auriculares. Su popularidad le ha permitido expandirse, e incluso lanzar periféricos para teletrabajar y hasta sillas gaming.
El lanzamiento del Razer Blade en España, anunciado el pasado abril, supone un gran impacto para el sector, y la demostración de que el mercado está más vivo que nunca. Pero después de la alegría, llegó la angustia. ¿está este portátil a la altura de lo que hemos imaginado?
El mejor diseño
Nada más sacarlo de la caja, es evidente que la respuesta es sí. Sí. De verdad. Este es el portátil gaming más elegante, atractivo y mejor diseñado que he probado, así de claro. Hasta el punto, de que es difícil admitir que es un portátil gaming.
La comparación más acertada sería con un MacBook Pro, y no con un modelo gaming de la competencia, tanto en calidad de materiales como en los acabados. El diseño es simple, de nuevo como el portátil de Apple, pero eso es lo que lo hace atractivo. El color negro mate cubre todo el dispositivo, exceptuando el icónico logotipo de Razer que brilla en su característico color verde.
Como también brilla el teclado, esta vez en RGB y completamente personalizable gracias a Razer Synapse. En efecto, el portátil está considerado como un 'periférico' más dentro del programa y por lo tanto, tenemos acceso a una multitud de opciones, y no sólo estéticas.
Por jugadores, para jugadores
En general, se nota que este es un producto para jugadores, y no lo digo por el diseño; con Synapse, por ejemplo, podemos activar un "Modo juego" que deshabilita la tecla Windows, y también podemos hacer que haga lo mismo con las combinaciones Alt + Tab y Alt + F4 que nos pueden sacar del juego. Es mucho más útil que el "Modo juego" de Windows, la verdad.
Otro detalle que me ha encantado, y que dice mucho de las prioridades de Razer, es que la pantalla del modelo que he podido probar tiene una frecuencia de refresco de nada menos que 360 Hz. Sabía que tenía que probarlo con shooters en primera persona y en juegos de carreras, y eso es justo lo que hice.
En Doom, donde conseguir altas tasas de frames es más fácil, realmente descubrí la gran ventaja de los 360 Hz. Los movimientos son extraordinariamente fluidos y realistas, y la sensación, sin igual. En F1 2020 (a la espera de la versión de este año), la sensación de velocidad no tuvo igual; en ninguna otra pantalla he sentido lo mismo.
Sin embargo, no todos los juegos son capaces de aprovechar esa frecuencia de refresco; en muchos casos, la tasa de frames tiene un límite para no afectar al cálculo de físicas, y con este portátil lo alcanzarás.
Razer ofrece tres opciones para la pantalla. Los 360 Hz se obtienen sólo en el panel de resolución 1080p, y por lo tanto, la imagen en este caso podría ser más nítida. Sin embargo, no es algo que haya echado de menos en los juegos, y la baja resolución me ha permitido exprimir más el hardware para conseguir esas altas tasas de frames. Es la opción recomendable si jugar es nuestra prioridad.
Razer también ofrece una pantalla 4K de tecnología OLED pero, sinceramente, es demasiado para las 15,6 pulgadas de este portátil y te costará jugar a la resolución nativa. El término medio es la pantalla 2K, o QHD, que puede alcanzar los 240 Hz y que tal vez sería la más adecuada si, además de jugar, quieres trabajar o crear contenido.
Mientras descuartizaba demonios, me di cuenta de que el teclado era uno de los mejores que había podido probar. Las limitaciones son las que son, especialmente teniendo en cuenta el reducido grosor de este portátil, pero es notable que Razer haya conseguido una buena sensación táctil. El trackpad también es digno de mención, tanto por lo grande que es como por las sensaciones fluidas que da, aunque por supuesto, si vas a jugar lo recomendable es comprar un ratón gaming de portátil.
Experiencia pura gaming
Por supuesto, un buen portátil gaming es uno que usa los mejores componentes disponibles. Es aquí donde podríamos encontrar el único 'punto negro' del Razer Blade 15, si es que podemos llamarlo así. Y es que este portátil aún depende de la décima generación Intel Core, partiendo del Core i7 de seis núcleos y llegando hasta el de ocho núcleos que pudimos probar.
No sería malo, si no fuera por los grandes avances obtenidos en el último año en esta materia. Tanto la 11ª generación Intel Core como los nuevos AMD Ryzen 5000 para portátiles son muy superiores, y eso se nota en las pruebas sintéticas; en Cinebench R20, consiguió 3675 puntos en multinúcleo y 487 puntos en un núcleo y en Geekbench. Este no es el mejor portátil para teletrabajar, pero no es ni mucho menos malo con 6546 puntos en PCMark 10, y las sensaciones escribiendo artículos, editando fotos y trabajando en general fueron muy buenas.
Pero este es un portátil gaming, y donde realmente demuestra su valía es en los juegos. Para demostrarlo, puse uno de los títulos más exigentes de la actualidad, Control. Este juego es uno de los primeros que ha demostrado el potencial del trazado de rayos, o 'ray-tracing', una técnica consistente en calcular cómo los rayos de luz rebotan con cada superficie.
En Control, eso se traduce en reflejos ultrarrealistas, y una ambientación increíble; y pese a lo duro que es en el hardware, el Razer Blade 15 fue capaz de mostrarlo en pantalla a 60 frames por segundo.
La compatibilidad con las tecnologías RTX de Nvidia es un as en la manga de este portátil, y eso se demuestra tanto en el trazado de rayos como en DLSS, una tecnología que usa aprendizaje automático para ampliar la imagen. Así que podemos tener el juego a una resolución inferior para ganar frames por segundo, y aún así conseguir una imagen nítida gracias a DLSS. Un juego que demostró esto fue Death Stranding, con el que conseguí mejores tasas de frames, aunque tal vez no tantas como si fuese una pantalla 4K.
El juego que tal vez aprovecha mejor estas tecnologías es Cyberpunk 2077, que pude ejecutar a 60 frames por segundo incluso en nivel Ultra con trazado de rayos; en este caso, DLSS se puede usar para garantizar un tasa de frames estable incluso si empiezan las explosiones en los escenarios más amplios.
Ni que decir tiene que disfruté mucho jugando con el Razer Blade 15, y aunque los ventiladores suenan lo suyo (aunque no son los peores), las temperaturas se mantuvieron perfectamente controladas, algo sorprendente teniendo en cuenta el reducido grosor.
¿El mejor portátil gaming?
"Nunca conozcas a tus ídolos", es una máxima que suele ser recomendable. Pero no me arrepiento de por fin conocer al Razer Blade. En muchos aspectos, es lo que me esperaba; y aunque es cierto que en otros ha sido superado, es una mera cuestión de tiempo que este portátil gaming se adapte, y espero novedades en forma de nuevos chips en el futuro.
El Razer Blade es un raro caso de producto famoso que cumple las expectativas. La experiencia de uso ha sido excepcional, gracias a un diseño exquisito en el que todas las elecciones se han tomado de manera sopesada y certera.
Estamos ante el mejor portátil gaming del mercado en relación calidad/rendimiento. No es el más potente, por el mero hecho de usar componentes con una generación ya encima; pero tampoco se queda muy atrás y es capaz de ejecutar cualquier juego que queramos. Este es un portátil de gamers para gamers.
Es todo lo que imaginaba, y más. Y conforme escribo estas palabras y cierro el artículo, me doy cuenta de que, a veces, este trabajo no es tan malo.
El Razer Blade 15 ya está disponible en la página oficial de Razer.