Qualcomm presentó la semana pasada el Snapdragon 8 Gen 1, el chip que llevarán los mejores móviles Android a lo largo del 2022. Este componente no sólo será clave en los teléfonos de alta gama para ser más potentes, eficientes y capaces, sino que mejorará enormemente uno de los reclamos estrella para los compradores de España: la cámara.
El nuevo chip, que ahora ha cambiado de nombre con respecto a las generaciones anteriores, pone especial acento sobre las capacidades fotográficas. Tanto es así que la compañía con sede en San Diego ha agrupado todas las novedades fotográficas dentro de un categoría propia denominada Snapdragon Sight, una forma de hacer hincapié en la apuesta por subir el nivel de las cámaras de los móviles Android que están por venir.
Durante el Snapdragon Summit que Qualcomm ha celebrado en Hawái, en EL ESPAÑOL - Omicrono hemos tenido la oportunidad de probar de primera mano cómo serán las nuevas funcionalidades en la cámara que irán llegando a los móviles de gama alta de 2022, siempre y cuando sus lentes estén preparadas para hacerlo.
A por el modo cine
El nuevo chip incorpora el primer procesador de imagen (ISP) de 18 bits que Qualcomm Technologies ha creado para dispositivos móviles (hasta ahora era de 14 bits en el Snapdragon 888), lo que se traduce en que es capaz de recibir -y gestionar- 4.096 veces más datos de la cámara y ofrecer hasta cuatro pasos adicionales de rango dinámico para rendir mejor en escenas muy brillantes o muy oscuros, con mejor color y nitidez. Sin embargo, el chip incluye otra serie de características mucho más llamativas y diferenciales que pueden vender teléfonos por sí mismas.
En concreto, la nueva generación de chips permite grabar vídeo 8K HDR, realizar tres fotografías con tres lentes a la vez y de manera simultánea, tomar foto y vídeo en tiempo real con el modo panorámico, un modo de larga exposición más fácil de hacer sin trípode y la llegada de un mejor modo retrato en vídeo para competir directamente con el modo cine del iPhone 13.
El modo cine de los nuevos iPhone 13 se ha convertido en uno de los reclamos de venta del teléfono de Apple. La capacidad de grabar a un sujeto en tiempo real y desenfocar el fondo es algo especialmente llamativo y que aporta una apariencia profesional a lo que estamos grabando. Aunque esta funcionalidad ya se ha visto en algunos modelos Android, Qualcomm sube el nivel para hacerlo con un detalle mucho más preciso gracias a la gestión de la profundidad de la mano de la inteligencia artificial de su nuevo chip.
Las pruebas las pudimos realizar con buena luz frente a la bahía de Pauoa y el recorte que hacía la cámara del sujeto que estábamos grabando era excelente. Conseguía definir muy bien a la chica que estábamos grabando -con pelo recogido, que siempre ayuda-, y el bokeh definía muy bien el sujeto del fondo. La sensación es que se siente mucho más natural que cualquier otra opción que hayamos visto en Android.
La grabación de vídeo era de 30 frames por segundo y se podía cambiar al instante tanto al modo normal, como a un modo paralelo en el que comparar sobre la pantalla cómo definía el modo de grabación sin el efecto y con él aplicado. En cualquier caso, los móviles Android serán un rival de altura en este efecto de vídeo bokeh que llegará en los gama alta de este año. Eso sí, un detalle que de momento diferencia al sistema de Qualcomm con el de Apple es la posibilidad de desenfocar una vez grabado, que en este caso no pudimos probar si estará disponible.
Lo cierto es que el vídeo es cada vez más importante en el teléfono. Ya no basta con que un móvil pueda hacer buenas fotos, el contenido se consume mayoritariamente en vídeo y es aquí el próximo campo de batalla donde se batirán las mejores cámaras de los móviles.
Es por eso, que la otra gran novedad que los chips de Qualcomm ofrecerán a los fabricantes es la capacidad de grabar vídeo en 8K HDR, una forma de ofrecer la mayor resolución posible pensando en usuarios profesionales. Lo hace además con un detalle superior captando más de mil millones de tonos de color, una forma de certificar la grabación en HDR 10 Plus y grabación en RAW de 18 bits.
Panorámicas en tiempo real
Más allá del efecto bokeh, una de las novedades más llamativas que hemos podido ver estos días en el Snapdragon Summit de Hawái es la gestión de panorámicas en tiempo real. Hasta ahora, si se quiere hacer una panorámica con cualquier teléfono móvil será necesario mover el teléfono -y tener buen pulso- para arrastrando el teléfono en el aire capturar varias tomas.
Con la nueva funcionalidad del Snapdragon 8 Gen 1 esto se ha acabado. Ahora el chip es capaz de gestionar la información en tiempo real para tener panorámicas al instante, y lo que es más importante, sin deformación de la imagen. Una capacidad realmente impresionante cuando se ve en funcionamiento en directo. Se mueve con fluidez y el único retardo que puede apreciarse es en la gestión de personas si se el móvil desplaza rápido, pero lo cierto es que lo hace en cuestión de milésimas.
Uno de los detalles más importantes de esta funcionalidad es la gestión del color. En una toma en la que se alcanzan los 140 grados de ángulo de visión la iluminación puede variar enormemente, aún así, en las pruebas realizadas -y con luz directa- tanto la gestión del detalle como la nitidez y el color sorprendían del buen resultado que daba.
Las fotografías se guardan como una imagen de 16 megapíxeles, lo que permite llegar al detalle a la hora de hacer recortes pero sin ser un problema de almacenamiento en el teléfono móvil. Además, Qualcomm explica que la funcionalidad también llegará al vídeo, aunque el teléfono que teníamos aún no estaba preparado para hacerlo.
El mayor problema para aplicar esta tecnología a los teléfonos de gama alta es la propia lente que tienen que utilizar, o al menos la que Qualcomm ha empleado para hacer posible este modo en la demostración del Summit. La compañía de San Diego ha montado un ingenioso sistema compuesto por dos angulares que se combinan con dos prismas, una solución que permite junto con su nuevo procesador tomar panorámicas al instante.
Tres mejor que una
Otra de las novedades que viene con el nuevo procesador es la capacidad de tomar tres imágenes a la vez desde las diferentes lentes. Los móviles incorporan cada vez más cámaras, ahora Qualcomm quiere que los usuarios puedan tomar con un único disparo los tres puntos de vista y encuadre de cada una de ellas.
Ya hay algunas marcas como Honor, que han implementado la posibilidad de grabación múltiple, aquí sin embargo se va un paso más allá al poder incorporar una tercera lente y gestionarla en tiempo real.
Esto permite, por ejemplo, a los profesionales tener varios puntos de vista de un mismo evento dando así mayor versatilidad a la hora de cubrir un evento con varios puntos de vista pero un único dispositivo. Algo parecido a lo que hace Filmic Pro en iPhone, pero directamente sobre la aplicación de cámara del teléfono.
En las pruebas que hemos podido hacer con ella la función rinde de forma correcta aunque es menos llamativa que las dos anteriores ya que su caso de uso será menor. No siempre estar colocado en el mismo sitio funciona para los tres encuadres. Sin embargo, la respuesta de equilibrio de color o enfoque con las tres tomas rinde a buen nivel, es capaz de gestionar los tres sin priorizar uno sobre otro. Eso sí, cabe tener en cuenta que esta funcionalidad la pudimos probar únicamente para fotografía -aunque en un futuro podría llegar también a vídeo-.
Larga exposición más fácil
Si es complicado tener un buen pulso para hacer una fotografía panorámica, también lo es para hacer fotografías de larga exposición con las que por ejemplo lograr un efecto de fluidez en el agua o mejorar las tomas nocturnas. Ahora, el chip permite capturar y gestionar 30 imágenes (5 veces más que la generación anterior) y fusiona las mejores partes para crear una imagen final excelente.
En la prueba realizada sobre una cascada, basta con presionar una vez el disparador para que se inicie una rápida ráfaga que en cuestión de segundos permite tener el resultado final: agua cayendo con esa sensación sedosa de la larga exposición. El disparo múltiple es rápido, pero el detalle que más llama la atención es el procesado que permite tener la imagen final al instante, sin esperar nada.
Aunque este sistema lo hemos probado en la larga exposición para fluidos, también se podrá usar para el modo nocturno, lo que permitirá tener fotos más brillantes en condiciones de oscuridad y la capacidad de perfeccionar los detalles pequeños sin que se vean borrosos.
Un salto de calidad
En suma, el nuevo chip de Qualcomm demuestra haber dado un paso hacia adelante en cuanto a capacidad fotográfica y vídeo, es mucho más capaz que la generación previa y busca atraer a los creadores de contenido a los móviles Android.
Sin embargo, aunque el nuevo Snapdragon pueda poner los mimbres, ahora la pelota queda en manos de los fabricantes. Serán las marcas las encargadas de centrarse en cada una de las características para integrarlas no sólo en su sistema, sino en sus equipos, con cámaras potentes y soluciones que de verdad aporten valor al usuario. Las posibilidades son reales, ahora sólo queda aplicarlas.