He probado la 'roomba' más potente de Roborock y no necesito nada más para tener mi casa limpia

Desde la llegada al mercado de los robots aspiradores a principios de los años 2000, el sector no ha dejado de crecer, con todo tipo de innovaciones tecnológicas que los hacen cada vez más potentes, precisos y autónomos. La variedad de modelos es enorme, con dispositivos que también friegan y se limpian solos y otros con sistemas para salvar las alfombras. En este contexto Roborock, uno de los líderes del sector, presentó recientemente el S8, que apuesta por la máxima potencia para aspirar y fregar tu casa, que hemos podido poner a prueba en EL ESPAÑOL-Omicrono durante todo un mes.

El S8 que se ha enfrentado a pelos de mascota, suciedad incrustada y las pelusas más recónditas de mi casa, es el modelo básico de la nueva generación de aspiradoras de Roborock, cuyo buque insignia es el S8 Pro Ultra. En algún momento he echado de menos la estación de limpieza que incluye esa versión, pero también he disfrutado de la comodidad de tener una base de carga compacta y discreta.

Sobre el papel, la S8 es toda una 'bestia': la mayor potencia hasta ahora en un robot aspirador de Roborock, con 6.000 Pa, doble rodillo de goma para limpiar mejor, mopa con tecnología VibraRise 2.0 para eliminar las manchas más difíciles... Veamos si el dispositivo, que está ahora mismo en oferta en Amazon por 589 euros (un 16% menos de su precio de salida) ha cumplido mis altas expectativas.

Primeros pasos

No hay sorpresas al abrir la caja. Además de la unidad de limpieza, se incluye la mopa extraíble, un protector de suelo, la estación de carga, un cable de alimentación y todas las instrucciones en papel, algo que los de vieja escuela agradecemos para no tener que descargarlas en el móvil o el ordenador. 

Lo primero es elegir un lugar despejado para que el robot pueda salir y volver sin problema, pegar el protector de suelo (imprescindible en los robots aspiradores con mopa) y enchufar la base de carga. Una vez completada esta breve instalación, ya puedes ponerlo a cargar mientras descargas la app de Roborock. Se echa en falta algún elemento para poder enrollar el cable de la estación, pero este tampoco es muy largo.

La Roborock S8 queda bien en cualquier lugar I.M. Omicrono

Una vez cargado el robot, toca mapear tu casa. Para ello, el Roborock S8 dispone de un sistema de navegación LiDAR, que le permite escanear con gran precisión todas las habitaciones, obstáculos y muebles incluidos. Como gran novedad, incluye la opción de tener un mapa con varias plantas, ideal para quienes vivan en un chalé o un dúplex. No es mi caso, pero es una función interesante, ya que reconoce automáticamente hasta cuatro plantas distintas.

Completado el proceso de escaneado y edición del mapa para definir mejor las zonas de limpieza y la división de las estancias, toca ponerlo a limpiar. Y ahí es donde el Roborock S8 saca toda su artillería: un gran nivel de succión que 'arrasa' con todo, ya sean pelos de gato, perro o humano, pequeñas piedras, arena y hasta el polvo más fino. Es pequeño (apenas 10 cm de altura), por lo que puede meterse bajo la mayoría de muebles y limpiar a fondo cualquier habitación.

La cubierta superior del Roborock S8 I.M. Omicrono

En eso colaboran especialmente los dos grandes rodillos de la zona central, llamados DuoRollers, que giran en direcciones opuestas. Así, además de atrapar la suciedad, consiguen que no se enrollen los pelos, una de las asignaturas pendientes de los robots aspiradores desde hace tiempo. 

El sistema de navegación Reactive 3D y la tecnología de imagen por infrarrojos del robot le permiten identificar y evitar cualquier obstáculo (algo crucial en una casa con mascotas y niños) y, a diferencia de las antiguas 'roombas', es de una delicadeza extrema a la hora de acercarse a objetos y paredes. Además, también tiene un sistema para detectar automáticamente dónde es probable que se atasque y recomienda señalar zonas prohibidas, para boquearlas desde la app y que no haya ningún riesgo.

La parte inferior del Roborock S8 con su doble rodillo I.M. Omicrono

La única pega que podemos ponerle a la Roborock S8 en materia de aspiración es que su depósito es algo pequeño (400 ml) y, al no disponer de estación de limpieza con depósito, hay que estar más pendiente por si se llena y vaciarlo con frecuencia para que no disminuya la calidad de la limpieza. A más de uno de compensará hacerse con el modelo Pro Ultra, que sí incluye esta posibilidad.

Fregado y aplicación

En lo que respecta al fregado, el S8 también ha hecho los deberes. Basta con llenar el depósito de agua de 300 ml colocado en la parte frontal y ajustar la mopa extraíble para que esté listo para dejar la casa reluciente. He probado distintas intensidades de fregado a través de la app y todas han dado buen resultado tanto en tarima como en suelo enlosado. La tecnología de fregado sónico VibraRise 2.0, que vibra con una frecuencia de 3.000 veces por minuto, ha demostrado ser casi infalible y consigue desprender del suelo suciedad seca.

El Roborock S8 fregando el suelo de la cocina I.M. Omicrono

Además, el Roborock S8 utiliza ultrasonidos para determinar si se encuentra sobre una alfombra o sobre suelo liso, algo fundamental para este tipo de robots aspiradores. Eso le permite activar la función Carpet Boost+ y levantar la mopa 5 mm para evitar mojar la alfombra que, eso sí, debe ser de pelo corto. Las de pelo largo siguen siendo la kriptonita de estos robots, al menos de momento.

En lo que han hecho muchos avances los técnicos de Roborock es en el funcionamiento de la aplicación: fácil de usar, muy útil y con muchas opciones. Una de las más interesantes, aparte de personalizar los mapas, es establecer rutinas de limpieza para decidir los horarios en los que quieres que aspire y friegue automáticamente. También se pueden elegir las horas de recarga para evitar las horas punta, algo muy a tener en cuenta a la hora de ahorrar en la factura de la luz.

La app de Roborock es muy útil I.M. Omicrono

La aplicación te permite determinar cuatro niveles de potencia de succión y tres de intensidad de fregado. Los niveles mínimos ya consiguen resultados notables, pero es en los de máxima potencia y mayor cantidad de agua donde se consigue una limpieza casi impecable.

También se puede elegir el tipo de patrón a la hora de limpiar, el progreso si está limpiando o comprobar la duración de la batería, que con sus 5.200 mAh puede hacer frente a varias plantas de una casa sin necesidad de recargarse. En la app se pueden configurar más cosas, como la opción de controlar el robot a distancia, gestionar las actualizaciones de firmware y otras personalizaciones.

¿Me la compro?

La Roborock S8 es un digno sucesor de la S7, un robot aspirador de gama alta que se sitúa entre los modelos más punteros del mercado. Las novedades, como los DuoRollers o el sistema de detección de obstáculos, son una importante mejora y aportan una mayor comodidad al usuario y mejor limpieza.

El S8 brilla especialmente donde otros flojean, en el fregado, y en la fantástica integración con la app, que ofrece muchas opciones de configuración sin ser compleja o difícil de usar. El único pero importante que le he encontrado tras un mes de uso es el tamaño de su depósito de suciedad, que te obliga a estar más pendiente y a vaciarlo con frecuencia.

Ahora que el S8 está de oferta en Amazon por 589 euros puede ser una gran oportunidad para hacerse con él. Es un precio inferior al del actual buque insignia de Roomba, el j7+, y eso que mejora algunas de sus prestaciones. En definitiva, un gran producto con todo lo necesario para que puedas tener la casa siempre limpia sin esfuerzo.

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