Sony se ha convertido, por méritos propios, en la referencia cuando hablamos de auriculares inalámbricos de alta calidad. Cuando se piensa en unos auriculares de diadema sin cables, con sonido de alta fidelidad y cancelación de ruido que nos aíslen del mundo pensamos en los WH-1000XM5; mientras que si pensábamos en un modelo de las mismas características pero intraauricular el que nos venía a la cabeza siempre era los WF-1000XM4. Ahora, la compañía japonesa ha ido un paso más allá y trae a España los WF-1000XM5, la renovación de sus icónicos auriculares con el ambicioso reto de mejorar lo excelente y volver a revalidar el trono del sonido personal.
Estos auriculares de alta gama mejoran en todo a la generación pasada. Ofrecen una mejor cancelación de ruido, avanzan en el sonido inmersivo ofreciendo música con mayor calidad y detalle, mayor claridad en las llamadas, más funciones inteligentes y todo en un tamaño considerablemente más pequeño y ligero, pensando en llevarlos siempre puestos.
Su precio oficial es de 319 euros, aunque es fácil encontrarlos rondando los 270 euros. Una propuesta de alta gama que viene no sólo a mantener el hueco y la buena posición de los WF-1000XM4, sino a competir directamente contra los populares AirPods Pro y opciones más especializadas como los Bose QuietComfort Earbuds II. Para saber si son tan buenos como prometen, en EL ESPAÑOL - Omicrono los hemos probado durante las últimas semanas.
Un diseño más compacto
Un punto clave, más importante de lo que parece, de los auriculares inalámbricos es su diseño. Combinar ser lo más pequeño y liviano posible para al mismo tiempo hacer hueco a un driver de tamaño considerable y a unas salidas de aire con las que el sonido pueda desenvolverse con altos estándares de calidad. Una ecuación complicada pero que Sony consigue un resultado excelente con el nuevo modelo.
Desde los WF-1000XM3 Sony se consagró como la referencia en los auriculares de alta calidad de sonido y aún mejor cancelación de ruido. Desde entonces, la compañía nipona ha trabajado en mantener —y aumentar— esa respuesta sonora en un dispositivo cada vez más pequeño. Ahora, los nuevos XM5 son un 25% más pequeños que la generación anterior, los XM4; pero al mismo tiempo son considerablemente más ligeros —pesan un 20% menos— con 4,6 gramos por auricular.
Los WF-1000XM5 son pequeños y elegantes. Y tienen un ajuste comodísimo en la oreja con los que podemos pasar horas con ellos puestos, tanto que te olvidas que los llevas puestos. Durante el tiempo que los he probado, se ajustaban tan bien a mi oreja que en muchas ocasiones terminaba la reproducción de música y los seguía manteniendo puestos para aislarme de los sonidos externos. Tienen esa cancelación de ruido que te meten en una burbuja y permiten concentrarte fácilmente.
Vienen con una nueva textura brillante que les hacen más premium al tiempo que mantienen, pese a reducir tamaño, el panel táctil exterior con el que poder controlar la reproducción de música o la cancelación de ruido. Un detalle importante son las nuevas almohadillas. Un foam desarrollado por la compañía que mejoran la succión, la comodidad y el aislamiento del exterior, al tiempo que viene con un nuevo tamaño XS pensando en la comodidad de cada vez más usuarios.
Un sonido superior
Pero si hay un reclamo claro de la nueva generación de auriculares true wireless de Sony es el sonido. Cualquiera de los otros cambios estéticos quedarían en nada si los renovados WF-1000XM5 no superasen también al modelo anterior en especificaciones sonoras. Y, como es marca de la casa, lo hace tanto en la reproducción de contenido como en una avanzada cancelación de ruido con la capacidad de abstracción con sólo colocarlos en las orejas.
Cuentan con un diafragma de 8,4 mm, más grande que el modelo anterior, Dynamic Driver X que se traduce en un desempeño potente, consistente y certero de todo tipo de sonidos, especialmente de música. Para construirlo, Sony explica que combina distintos materiales de la cúpula y el borde para reducir la distorsión y ofrecer así la gran calidad de sonido que se espera de ellos. Lo cierto es que su reproducción de frecuencias amplias permite diferenciar fácilmente desde las voces de una forma clara hasta el último detalle de los instrumentos que nos rodean.
Disponen de certificación de audio de alta resolución LDAC, con la idea de que el usuario pueda disfrutar de la música sin pérdidas y apreciar así todo el detalle de la música. Precisamente, incorpora un sistema que mejora los archivos digitales de música comprimida en tiempo real —incluidos los que provienen de servicios de streaming—. para reconocer dinámicamente instrumentos, géneros y elementos individuales de cada canción en tiempo real y restaura las frecuencias perdidas en la compresión. Una forma más de engrandecer el sonido que nos acaba llegando.
Además del audio sin pérdida, los nuevos auriculares también buscan hacer frente a la demanda cada vez mayor de reproducción de contenido en audio espacial. Ya no sólo consigue que la música rodee al usuario, sino que la nueva generación dispone de la tecnología de seguimiento de cabeza, con lo que el campo sonoro conserva la posición virtual original para que se sienta la inmersión total en el contenido.
Más allá del sonido, el otro reclamo —y por lo que Sony se ha ido imponiendo en el mercado con cada generación de auriculares— es su sistema de cancelación de ruido. Cuentan con dos procesadores patentados que cancelan más ruido externo que nunca, una nueva unidad del diafragma Dynamic Driver X de alto rendimiento, un sistema de dos micrófonos de retroalimentación y nuevas almohadillas para conseguir un ajuste más estable. Un combo completo para aislarse del mundo.
El sistema de microfonía mejora en esta generación en las frecuencias más bajas, con lo que permite capturar sonidos de forma más precisas y adaptarlo así a la combinación del procesador con Noise Cancelling HD QN2e y el procesador integrado V2, ambos trabajan para aislar todo ruido del exterior, gestionar el modo de transparencia cuando es necesario y procesador audio de alta calidad de 24 bits con una amplificación análoga de alto rendimiento.
¿Me los compro?
Apostar por la gama alta de auriculares de Sony es hacerlo sobre seguro. Tanto los WF como los WH de cualquier generación son unos dispositivos excelentes que —por la experiencia que devuelven— merecen cada euro invertidos en ellos. Son auriculares de alta calidad, de larga duración, de buena construcción, con alta tecnología y los que se sitúan a la vanguardia del mercado, y los WF-1000XM5 son la reafirmación del liderazgo de la compañía japonesa en este sentido.
La mayor revolución de los WF-1000XM5 con respecto a la generación anterior está en el tamaño. Aunque hay considerables mejoras en sonido, cancelación de ruido y llamadas, lo cierto es que el factor diferencial de cambio con respecto a la generación previa es que son considerablemente más compactos cuando los tenemos en la oreja colocados. Son más cómodos, ligeros y podemos llevarlos puestos durante horas que nos olvidaremos que están ahí.
A nivel de sonido son excelentes. Se encuentran entre los mejores del sector y la reproducción de música con ellos es, sencillamente deliciosa. Sin embargo, el aspecto que más me gusta de los WF-1000XM5 es la cancelación de ruido. Te los pones y se apaga el mundo. Aunque son cómodos para usar en la oficina —también por el soporte multipunto—, los he usado en zonas muy concurridas y parece realmente que estás solo, nada te molesta.
En suma, los Sony WF-1000XM5 son uno de los mejores auriculares que puedes comprar. Su precio es propio de la gama alta (319 euros) aunque se pueden encontrar ya unos 50 euros menos de su precio original en tiendas como Amazon o Media Markt. Aún así, si no desea invertir tanto, puede buscar la generación pasada en alguna tienda que los siga teniendo en stock, o bien ir a los Sony LinkBuds S, que ofrecen una magnífica combinación de calidad y precio.