Sony, uno de los fabricantes de televisores más populares en España, cuenta con una amplia gama de smart TV con diferentes tecnologías y tamaños de pantalla para ver series y películas sin parar. Una compañía que el pasado mes de abril presentó sus nuevos modelos Bravia y entre ellos destacaba el Sony Bravia 9. Un televisor con tecnología de pantalla MiniLED que pretende hacer olvidar al OLED con una gran calidad de imagen y sonido como principales armas.

El Sony Bravia 9 es el último televisor estrella de la gama del fabricante destinada a ofrecer la mejor experiencia de cine en casa; y tiene un precio de 3.499 euros para su versión de 75 pulgadas, que es la que hemos probado en EL ESPAÑOL - Omicrono durante unas semanas. Una TV que quiere destronar al OLED incorporando una serie de mejoras y una interesante ficha técnica, como una gran calidad de imagen, un sonido muy bien integrado o un brillo alto.

También dispone de otra serie de características a destacar. Entre ellas se encuentran un diseño de calidad y elegante, la incorporación de Google TV como sistema operativo, su procesador de imagen XR que ofrece un gran rendimiento e, incluso, una tasa de refresco de 120 Hz y Dolby Vision para pasar horas jugando a videojuegos de tus consolas favoritas. Pero tiene un importante inconveniente: y es que su precio no es apto para todos los bolsillos.

Un diseño de calidad

El Sony Bravia 9 es un televisor que cuenta con un diseño elegante y cuidado que recuerda al de otros modelos de la compañía y que casa bien con la decoración de cualquier salón. Esta TV viene con dos patas metálicas en la parte inferior del chasis que se pueden colocar en tres posiciones diferentes: en los extremos, más centradas para ocupar menos espacio en el mueble y otra que eleva la altura del televisor para colocar una barra de sonido abajo.

Unas patas que se colocan fácilmente, ya que apenas basta con atornillarlas. Y en nuestro caso, al contar con un mueble bastante amplio, las pusimos en los extremos del dispositivo. Eso sí, instalar el televisor es una tarea imposible para una única persona, ya que su pantalla de 75 pulgadas hace que sea necesario al menos dos para poder sacarla de la caja y colocarla en su sitio del salón. 

Una vez instalada, el Sony Bravia 9 impresiona por su calidad de construcción y diseño con un acabado metálico en color gris que aporta un aspecto elegante; además de por su enorme tamaño. Destaca principalmente por ofrecer una pantalla con unos biseles muy finos y por ofrecer un grosor muy reducido, de apenas 4,8 centímetros. En su parte posterior se encuentran los diferentes puertos de conexión e incluye una serie de tapas que sirven para tapar los cables para lograr una estética más uniforme.

En esa parte trasera, que tiene un diseño como de rombos, también se encuentran los altavoces y un pequeño botón que sirve para apagar el televisor, cambiar de canal o modificar el volumen, entre otras funciones. En cuanto a la conectividad, el Sony Bravia 9 viene con dos puertos HDMI 2.1 para sacar el máximo partido a las consolas de última generación y otros dos puertos HDMI 2.0; además de WiFi, Bluetooth, Ethernet para conectar cable de Internet, un puerto para auriculares de cable o dos salidas USB.

Por otra parte, cabe destacar el mando a distancia. Como sucede con otros televisores de Sony, el Bravia 9 incluye dos mandos a distancia. Uno muy básico, con un diseño clásico de color negro y una distribución de botones tradicional, y otro más refinado, que es el que hemos utilizado. Este tiene un aspecto de color negro con pequeñas motas azules, un tamaño compacto para un buen agarre y con seis botones de acceso directo.

Entre ellos se encuentran Disney+, Netflix, Amazon Prime Video, YouTube, Bravia Core y Crunchyroll. El mando también integra el micrófono para utilizar la voz con el asistente de Google e incorpora una interesante funcionalidad destinada a aquellos que suelen perder el mando a distancia: se puede pedir al asistente que lo busque y, para ello, este comenzará a emitir un sonido para localizarlo, ya que lleva un pequeño altavoz incorporado.

Dentro del diseño también hay que hablar de software y es que el Sony Bravia 9 incluye Google TV como sistema operativo, que resulta ser uno de los más intuitivos y cómodos de utilizar. Además, funciona muy bien, es rápido, no tiene publicidad intrusiva y ofrece acceso a una gran cantidad de juegos y aplicaciones gracias a Google Play Store, como Apple TV+ hasta Netflix, Max, Disney+ y muchas más. También da recomendaciones personalizadas y cuenta con listas de seguimiento, entre otras funciones.

Gran imagen y sonido

A la hora de ver contenido el Sony Bravia 9 se comporta realmente bien. El televisor viene con un procesador XR Processor que trabaja juntamente con una variedad de tecnologías para ofrecer un mejor color, movimiento, nitidez y calidad de imagen. En cuanto a la pantalla, se trata de un panel MiniLED con una resolución 4K Ultra HD (3840 x 2160 píxeles), compatibilidad con HDR10, HLG y Dolby Vision y con una tasa de refresco de 12 hercios.

Nada más encenderlo el Sony Bravia 9 ya muestra todo su potencial y es que gracias a sus características este modelo ofrece una altísima calidad de imagen que hace olvidar al OLED. Desde unas imágenes repletas de detallas hasta colores muy vivos, una gran fluidez, unos negros muy logrados y un alto brillo, que permite ver cualquier contenido sin ningún problema incluso si se coloca la TV cerca de una gran ventana. Incluso la pantalla MiniLED ofrece unos buenos ángulos de visión, tanto si uno ve una película sentado frente al televisor como si se está más hacia los lados.

El televisor también ofrece siete modos de imagen diferentes: viva, estándar, cine, profesional, calma, foto e IMAX Enhanced. Durante los días que hemos probado el televisor lo hemos utilizado para ver tanto películas como series, y el rendimiento y la experiencia han sido de primer nivel. Una calidad que también se traslada a la hora de jugar a videojuegos, donde no hemos experimentado ningún tipo de fallo, como puede ser lag o degradación en la imagen; y con partidas fluidas y con ritmo. 

Por último, y no por ello menos importante, hay que hablar del sonido. El Sony Bravia 9 incluye un total de ocho altavoces, de los cuales seis tienen una potencia de 10 W y el resto de 5 W. En concreto, el televisor dispone de dos tweeters, dos subwoofers, dos medios y dos tweeters de haz que ofrecen un sonido potente, nítido y sin distorsiones. Además, son compatibles con Dolby Adio y Dolby Atmos para un sonido inmersivo para sentirse dentro de la película, DTS Digital Surround, DTS Express, DTS-HD Master Audio, audio de alta resolución DTS-HD y DTS:X.

¿Me lo compro?

El Sony Bravia 9 es uno de los mejores televisores de este año, que destaca más por sus puntos a favor que por sus contras. Entre sus bondades se encuentran desde su diseño elegante hasta una altísima calidad de imagen, un potente sonido, un brillo alto, un panel MiniLED que con su alta calidad de imagen hace olvidar al OLED, aunque el negro en estos últimos es más puro. También destaca su procesador que ofrece un gran rendimiento a la hora de ver contenido y de jugar a videojuegos.

Incluso es todo un acierto incluir Google TV como sistema operativo, que es uno de los más completos e intuitivos del mercado y su sonido es potente e inmersivo, que, junto con su pantalla de 75 pulgadas, parece como si se estuviera en una sala de cine. Como punto en contra está su precio y es que 3.499 euros no es una cantidad de dinero que esté al alcance de todo el mundo.